Uso de preparados para la tos y el resfriado durante la lactancia

Las reacciones adversas en los lactantes por la ingesta de medicamentos por parte de la madre dependen en gran medida de la cantidad de leche consumida por el lactante, el momento de la lactancia en relación con la dosis, la dosis del medicamento, el intervalo de dosificación y la duración de la terapia. Cuando se toman medicamentos, se debe indicar a las madres lactantes que tomen la medicación después de la lactancia, a la dosis efectiva más baja y durante el menor tiempo posible. En general, hay pocos datos de estudios en humanos sobre el uso de antihistamínicos, descongestionantes y productos para la tos durante la lactancia. Los estudios sobre la pseudoefedrina, la triprolidina y la loratadina en humanos concluyen que el lactante amamantado recibiría niveles bajos de cada fármaco. Dado que la AAP también considera que la triprolidina y la pseudoefedrina son compatibles con la lactancia materna, estos dos fármacos deberían ser las opciones de primera línea. La AAP considera que la codeína es compatible con la lactancia materna y sería una opción aceptable para su uso a corto plazo como antitusígeno. Es importante tener en cuenta que muchos de los productos líquidos para la tos y el resfriado contienen alcohol. Además, muchos de los productos combinados son una mezcla de un antihistamínico y un descongestionante y pueden contener también aspirina, paracetamol, ibuprofeno o cafeína. Es preferible que las madres lactantes sólo tomen los medicamentos necesarios y eviten estos productos combinados. La AAP considera que el alcohol, el paracetamol, el ibuprofeno y la cafeína son compatibles con la lactancia. La aspirina se ha asociado a efectos negativos significativos en algunos bebés lactantes, y la AAP recomienda dar aspirina a las madres lactantes con precaución. Las madres que toman productos para la tos y el resfriado deben estar atentas a los efectos adversos en sus bebés amamantados. Los lactantes pueden experimentar una estimulación nerviosa central paradójica con los antihistamínicos e irritabilidad e insomnio con los descongestionantes.

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