No hay nada peor que salir de una peluquería con un corte de pelo que no soportas. (¡Especialmente cuando has desembolsado un buen dinero por él!) Sigue estos consejos para asegurarte de no volver a tener un desastre capilar.
1. Consulta de antecedentes
Un buen peluquero es la clave para un corte de pelo fabuloso. Pero, ¿dónde encontrarlos? Entra en Internet para investigar diferentes peluquerías y leer opiniones sobre determinados estilistas. Si haces los deberes, sabrás que estás en buenas manos incluso antes de sentarte en el lavabo.
2. Lleva una foto. Lleva una foto – y déjate llevar
Sin duda ayuda llevar una foto de un corte de pelo que quieras copiar: a los peluqueros les encantan las referencias visuales. Sin embargo, sé realista en cuanto a tu inspiración y entiende que el estilo puede no adaptarse del todo a tu tipo de cabello o a la forma de tu cara. Lo ideal es que tú y tu peluquero discutáis el corte y decidáis cómo recrear un look similar que se adapte a tus necesidades individuales.
3. Opinión profesional
Tu peluquero también puede tener algunas ideas sobre el corte que te irá mejor, y sin duda merece la pena escucharlo, ya que es el profesional. Eso sí, no te rindas completamente a sus sugerencias, sobre todo si has acudido con un estilo firme en mente. Consultad juntos el corte y proceded sólo cuando ambos tengáis una dirección clara en mente.
4. Política de honestidad
Cuando tu peluquero empiece a hacerte preguntas sobre la frecuencia con la que te lavas, te secas o tratas el pelo, ¡no mientas! No es una prueba para ver lo bien que lo cuidas. Ser sincero sobre tu rutina de mantenimiento del cabello ayuda a tu peluquero a crear un estilo que se adapte a tu estilo de vida. No tiene sentido hacerse un corte de pelo de alto mantenimiento si sólo estás dispuesta a dedicar unos minutos a peinarte.
5. Sé específica
¿No quieres que te corten el pelo más allá de una longitud determinada? Odias que te hagan la raya del pelo en una determinada dirección. Habla claro. Tu peluquero no sabe leer la mente. También deberías intervenir durante el corte si te sientes incómoda: es más fácil hacer ajustes sobre la marcha que al final.
6. No te muevas. No te muevas
Sentarse en la silla del salón debe ser un ejercicio de postura y aplomo. Mirar una revista o el teléfono (o peor aún, hablar por teléfono) dificulta el trabajo del peluquero. Siéntate con la cabeza recta, sin cruzar las piernas y con la mirada hacia delante. A nadie le gusta un corte torcido.
7. Atiende a las recomendaciones
A medida que se acerque el final de tu cita, tu estilista te hará sugerencias de productos y te dará consejos para mantener tu nuevo corte en óptimas condiciones. No lo atribuyas a un argumento de venta: dentro de lo que te dicen hay consejos de mantenimiento del estilo. A partir de ahí, depende de ti si quieres comprar los productos que te recomiendan en el salón o buscar tu propia alternativa en otro sitio.
8. Deja que se asiente
Los cortes de pelo espectaculares pueden requerir un tiempo de adaptación, así que dale unos días a tu nuevo estilo para que se asiente. Lávalo varias veces y péinalo de diferentes maneras para encontrar tu estilo. Si después de una semana sigues sin estar contenta, es hora de llamar a tu estilista para tener “La charla”…
9. Habla con tu estilista
No te quedes con las ganas: si te han cortado mal el pelo, ponte en contacto con él y hazle saber con calma que el corte no ha salido como esperabas. Un verdadero profesional te ofrecerá volver gratis para intentar mejorar el corte. Si el estilista se pone sarcástico o crees que no tiene arreglo, corta por lo sano y borra a ese peluquero de tu pequeño libro negro de belleza.