P: ¿Qué es un sofoco?
A: Los sofocos son ráfagas rápidas de calor en la piel y, a menudo, de sudor empapado que duran entre 30 segundos y unos cinco minutos. La cara y el cuello pueden ponerse rojos, el ritmo cardíaco puede aumentar y lo más probable es que empiece a sudar. Los sudores nocturnos son lo mismo, sólo que usted está dormido y se despierta de golpe por la sensación de calor y sudor que consume su cuerpo.
Estas explosiones repentinas, especialmente por la noche, pueden causar fatiga, irritabilidad e incluso olvido. Para el 10-15% de las mujeres, los sofocos son tan intensos que interrumpen las funciones normales, como dirigir una reunión o cumplir un horario. Si siente que sus actividades diarias se ven afectadas por los sofocos, asegúrese de hablar con su ginecólogo.
P: ¿Cuánto tiempo tendré sofocos?
A: Por término medio, es posible que tenga que vivir entre 10 y 15 años con sofocos. Aunque son esporádicos, su imprevisibilidad es muy frustrante. Veamos lo que puede esperar:
- 40 años: Es cuando la mayoría de las mujeres comienzan la perimenopausia. Comienzan algunos sofocos y sudores nocturnos. (Para algunas, la perimenopausia empieza a los 30.)
- 46-53: En Estados Unidos, ésta es la edad media de la menopausia, que se define como 12 meses seguidos sin periodo. Los sofocos suelen ser más frecuentes en los dos años posteriores a la menopausia.
- Finales de los 50 años: La mayoría de las mujeres siguen teniendo sofocos entre 4 y 10 años después de la menopausia. Pero la mayoría de ellos disminuirán en frecuencia y gravedad.
P: ¿Qué causa los sofocos?
A: Las causas exactas de los sofocos aún se desconocen, pero se cree que están relacionadas con los cambios en el centro termorregulador del cerebro, que controla la producción y la pérdida de calor, y está influenciado por sus hormonas. Durante la perimenopausia, las hormonas empiezan a actuar como una montaña rusa, con niveles de progesterona y estrógeno que cambian con grandes variaciones. Estos altibajos no se estabilizan hasta casi 10 años después de la menopausia.
P: ¿Cómo se pueden controlar los sofocos?
A: Hay varias formas de tratar los sofocos. Dado que los niveles hormonales están cambiando todo el tiempo, no tratamos los niveles hormonales – tratamos los síntomas. Comience con cambios en el estilo de vida, pero si eso no funciona, hable con su ginecólogo sobre los medicamentos recetados.
Estilo de vida
1. Manténgase fresca.
- Vístase en capas para poder quitarse fácilmente la ropa si tiene calor.
- Lleve fibras naturales en lugar de materiales sintéticos.
- Lleve un ventilador portátil en el bolso.
- Utiliza agua fría y toallitas pretratadas para refrescar la nuca cuando sientas que se acerca un sofoco.
2. Evite los desencadenantes.
- Puede que le lleve un tiempo descubrir sus desencadenantes. Para la mayoría de las mujeres, éstos incluyen el café y el vino tinto.
- Revise sus medicamentos con su proveedor. Se sabe que ciertos medicamentos para la presión arterial alta y el colesterol provocan sofocos.
3. Acupuntura: Las investigaciones han demostrado que la acupuntura puede ser muy eficaz para resolver los sofocos. En un estudio financiado por los Institutos Nacionales de Salud, los sofocos se redujeron casi a la mitad para el 50 por ciento de las mujeres durante ocho semanas de tratamiento con acupuntura.
Medicamentos con receta
Si los cambios en el estilo de vida no le ayudan a controlar los sofocos, hable con su ginecólogo sobre la medicación.
- Terapia hormonal para la menopausia: Este es realmente el estándar de oro para las opciones de tratamiento – es la forma más eficaz para asegurarse de que los sofocos son manejables. Hay una multitud de opciones, y su ginecólogo puede recomendar un tratamiento que satisfaga sus necesidades.
- Medicamentos no hormonales: Para las mujeres que no desean utilizar la terapia hormonal, o que no pueden utilizarla debido a problemas médicos, existen medicamentos no hormonales como la gabapentina, los inhibidores selectivos de la recaptación de serotonina (ISRS) y la clonidina.
- Nuevos medicamentos: Hay nuevos fármacos e inyecciones que se están probando y que pueden ocuparse de síntomas específicos de la menopausia. Especialmente si no puede tomar la terapia hormonal porque puede ser perjudicial para usted (una contraindicación médica) o si no encontró alivio con los otros medicamentos, estos nuevos fármacos pueden ser útiles. Hable con su proveedor para saber si puede utilizarlos.
Los sofocos son una parte inevitable de ser mujer. Pero con opciones de estilo de vida y tal vez la ayuda de su ginecólogo, usted puede manejarlos con una interrupción mínima de su vida.