Biblioteconomía

La biblioteconomía, los principios y las prácticas de funcionamiento y administración de las bibliotecas, y su estudio. Las bibliotecas han existido desde la antigüedad, pero sólo en la segunda mitad del siglo XIX surgió la biblioteconomía como campo de estudio independiente. Con la explosión del conocimiento en el siglo XX, se subsumió gradualmente en el campo más general de la ciencia de la información (q.v.).

Sala de Lectura del Museo Británico, diseñada por Sidney Smirke en colaboración con Anthony Panizzi y construida en la década de 1850. Ilustración de Smirke, del Illustrated London News, 1857.
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En la segunda mitad del siglo XIX, los países occidentales habían experimentado tal proliferación de libros de todo tipo que la naturaleza del trabajo del bibliotecario se vio radicalmente alterada; ser muy leído ya no era una característica suficiente para el puesto. El bibliotecario necesitaba algún medio de identificación fácil y rápida, así como fuertes habilidades organizativas y administrativas, y pronto se hizo evidente la necesidad de una formación especializada. Uno de los primeros pioneros en la formación bibliotecaria en Estados Unidos fue Melvil Dewey (q.v.), que estableció el primer programa de formación para bibliotecarios en 1887. Estos programas de formación en Estados Unidos evolucionaron hasta convertirse en programas de postgrado en educación bibliotecaria acreditados por la American Library Association (ALA; fundada en 1876).

En el siglo XX, los avances en los medios de recopilación, organización y recuperación de información cambiaron el enfoque de las bibliotecas, permitiendo a una gran variedad de instituciones y organizaciones, así como a los individuos, llevar a cabo sus propias búsquedas de información sin la participación de una biblioteca o del personal bibliotecario. Como resultado, las universidades comenzaron a ofrecer programas combinados de postgrado en biblioteconomía y ciencias de la información. Estos programas suelen ofrecer un título de máster y pueden ofrecer títulos más avanzados, incluyendo doctorados. Los detalles de la admisión y los requisitos de los cursos varían de una escuela a otra. En Estados Unidos y Canadá, la idoneidad de los programas de postgrado en biblioteconomía y ciencias de la información para preparar a los estudiantes para convertirse en bibliotecarios profesionales sigue estando garantizada por la acreditación de la ALA. Sin embargo, cada vez más, los graduados de estos programas se encuentran calificados para una variedad de puestos profesionales en otras partes de la industria de la información.

En muchos países el fomento de la biblioteconomía y los sistemas bibliotecarios es promovido por asociaciones nacionales y regionales de bibliotecas. La ALA, con sede en Chicago, por ejemplo, además de promover los servicios bibliotecarios y la biblioteconomía, tiene un amplio programa de publicaciones y celebra conferencias nacionales anuales. En todo el mundo existen asociaciones profesionales de naturaleza similar.

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