Se pueden utilizar otros limpiadores para lavar el revestimiento de aluminio. La lejía, el vinagre y el bórax son soluciones de limpieza eficaces para eliminar el moho. El revestimiento de aluminio debe ser enjuagado antes de aplicar la solución de limpieza. Cuando las soluciones de limpieza caseras no son eficaces para las manchas difíciles, pruebe con limpiadores específicos, como el fosfato trisódico, y con opciones biodegradables y respetuosas con el medio ambiente que se encuentran en las ferreterías y que están formuladas específicamente para el revestimiento de aluminio. This Old House revela que, independientemente del limpiador que se utilice, el revestimiento de aluminio debe lavarse con agua a baja presión para evitar daños. La suciedad, la mugre y el moho sólo pueden salir del revestimiento de aluminio si se restriega y se lava con agua a baja presión.
Otros consejos para limpiar el revestimiento de aluminio incluyen rociar el agua en ángulo cerca de las ventanas y las puertas, utilizar ayuda cuando se está en una escalera y fregar con cepillos suaves. Para mantener el revestimiento limpio, mantenga un programa regular de lavado y enjuague del revestimiento cada mes durante las estaciones de clima cálido.