“Mi hijo tiene las piernas tan largas que se sentaría incómodo”

¿Has visto que los niños pueden tener las piernas en todo tipo de posiciones extrañas cuando juegan? Los niños son mucho más flexibles que los padres y por eso muchas veces no les importa sentarse con las piernas dobladas o cruzadas, e incluso lo prefieren. A menudo somos los padres los que pensamos que parece incómodo, sólo porque a los adultos nos resulta incómodo.

¡Consejo! Si su hijo se queja realmente del espacio para las piernas, le recomendamos que haga descansos frecuentes durante los viajes más largos para que pueda estirar las piernas y deshacerse de algo de energía al mismo tiempo.

“Tenemos dos coches y no podemos permitirnos comprar dos sillas de auto caras”

El concepto iZi Modular de BeSafe le permite utilizar la misma silla de auto en varios coches. Solo tiene que comprar una base ISOfix adicional para instalarla en su segundo coche y luego puede cambiar fácilmente la misma silla entre los coches en un abrir y cerrar de ojos.

“Solo hacemos viajes cortos con nuestro coche, así que nos parece innecesario…”

Desgraciadamente, las distancias cortas no significan necesariamente que tengan menos riesgo de sufrir un accidente de coche, ya que la mayoría de los accidentes se producen en zonas urbanas. Incluso a velocidades de accidente de sólo 30 km/h, se ejercen fuerzas extremadamente elevadas sobre la silla de auto y el niño. Si el niño va orientado hacia delante, esas fuerzas afectan principalmente a la zona de la cabeza y el cuello cuando el niño es empujado fuera del asiento, mientras que una silla de coche orientada hacia atrás absorbe la mayor parte de las fuerzas cuando el niño es empujado dentro del asiento.

“Mi hijo no podía verme y, por tanto, se sentía incómodo”

Accesorios inteligentes como un espejo para bebés le permiten a usted y a su hijo verse durante todo el viaje y puede vigilar siempre a su pequeño para asegurarse de que está cómodo y feliz.

“Los zapatos de mi hijo tocarían el asiento trasero del coche, por lo que se ensuciaría” / “No quiero que el tirante delantero deje hendiduras en mis asientos de la banqueta trasera”

Colocar una funda protectora aquí puede resolver ambos problemas a la vez: protege la silla de coche de cualquier suciedad y también funciona como una capa suave que evita las hendiduras.

“Mi hijo no veía nada cuando iba orientado hacia atrás y se aburría”

Los niños orientados hacia atrás suelen ver mucho más de lo que esperamos. La posición sentada alta en un asiento orientado hacia atrás les permite ver a través de las ventanas laterales y traseras al mismo tiempo. Si se retiran los reposacabezas de los asientos traseros, tienen un campo visual aún más amplio.

“Mi hijo se quejaría de viajar orientado hacia atrás, ya que muchos otros niños viajan orientados hacia delante”

Cuando se cambia de portabebés, el niño no conoce otra cosa que viajar orientado hacia atrás. De las conversaciones con los padres hemos aprendido que la mayoría de sus hijos entienden realmente por qué viajan en sentido contrario a la marcha cuando los padres se lo explican de forma adecuada para los niños. La seguridad debe ser siempre lo primero y le animamos a que se lo explique a sus hijos.

“Tengo entendido que viajar en sentido contrario a la marcha es cinco veces más seguro en caso de choque frontal, pero ¿qué pasa con los impactos traseros?”

Además de que los impactos traseros son estadísticamente una fuente mucho más infrecuente de lesiones graves que los choques frontales, también hay que tener en cuenta algunos aspectos físicos. Cuando se viaja en sentido contrario a la marcha, el niño se sienta más lejos del punto de impacto en una colisión trasera, por lo que se proporciona una zona de deformación más larga incluso en coches con un maletero pequeño. Además, en una colisión trasera entran en juego muchas menos fuerzas, ya que ambos vehículos se mueven en la misma dirección, por lo que las fuerzas se reparten en ambos coches por igual. Por el contrario, en un impacto frontal ambos vehículos dejan de ir a velocidad cero en un instante.

“¿No se pondrá enfermo mi hijo si viaja orientado hacia atrás?”

El mareo en los viajes se produce cuando el sentido del equilibrio de una persona registra un desajuste entre el movimiento que perciben los ojos y la quietud del cuerpo. Algunas personas son naturalmente más sensibles a esto que otras y, a menudo, los adultos que se marean cuando viajan orientados hacia atrás (en un tren o en un autobús) son también más sensibles al mareo en general, por lo que sentarse orientado hacia atrás sólo lo aumenta para ellos.

El sentido del equilibrio de un niño, sin embargo, no está completamente desarrollado en sus años de infancia, por lo que el mareo relacionado con la dirección normalmente sólo se produce alrededor de la edad de 4 a 6 años, si es que se produce.

Marearse dentro de un coche puede tener muchas otras razones para los niños. A menudo también está relacionado con el ángulo/posición en la que están sentados, lo que han comido justo antes de abrocharse el cinturón o, a veces, incluso los olores dentro del coche. Para algunos niños, la posibilidad de ver muchas más cosas a través de las ventanillas cuando se levantan de su silla de coche para bebés puede provocar una sobrecarga sensorial, ya que los objetos que se ven a través de las ventanillas laterales pasan volando muy rápido. Cubrir las ventanillas laterales con un paño ligero durante un breve periodo de tiempo puede ayudar a los niños a acostumbrarse gradualmente a todos los nuevos estímulos.

“Nuestro coche es demasiado pequeño para una silla de auto grande orientada hacia atrás”

Muchas sillas de auto orientadas hacia atrás pueden instalarse con un espacio variable para las piernas, de modo que permiten una instalación muy compacta. De este modo, no suelen ocupar más espacio del necesario con una silla de auto orientada hacia delante, ya que las sillas orientadas hacia delante también deberían tener idealmente un espacio de 55 cm entre la nariz del niño y el asiento del vehículo de delante. Esta distancia recomendada se deriva de la cantidad de desplazamiento hacia delante permitida por la normativa y, por tanto, garantiza que el niño no golpee el asiento delantero del vehículo en caso de accidente.

En esta galería puedes ver algunos ejemplos de sillas de auto orientadas hacia atrás instaladas en algunos de los coches más pequeños del mercado como el Volkswagen Polo, el Audi A1, el Volkswagen Up o el Skoda Citigo.