La teoría predice que los sistemas de apareamiento están influenciados por las presiones de selección específicas del sexo y la dispersión de las hembras, pero rara vez se tienen en cuenta las posibles limitaciones impuestas por la historia de vida y la fisiología de una especie. Los perezosos son uno de los mamíferos terrestres más sedentarios de la Tierra, y nuestra hipótesis es que su escasa movilidad limita la capacidad de los machos para aprovechar el “potencial de poligamia” de su entorno. Caracterizamos la estrategia reproductiva de los perezosos de dos dedos de Hoffmann, Choloepus hoffmanni, en un agroecosistema del noreste de Costa Rica asignando la paternidad, caracterizando la distribución espacial de los individuos emparentados y describiendo el uso del espacio de 157 individuos. Los patrones espaciales de parentesco sugirieron que la dispersión natal estaba sesgada por las hembras y era suficiente para evitar la endogamia. Cinco (36%) machos adultos tuvieron descendencia con más de una hembra, y observamos tres aparentes apareamientos extraterritoriales, lo que indica que los perezosos no eran estrictamente monógamos. En general, los machos adultos estaban segregados y parecían mostrar cierta territorialidad en las zonas centrales, aunque las áreas de distribución de los machos adyacentes se solapaban en las zonas de poco uso. Por término medio, las áreas de campeo de los machos abarcaban más de tres hembras, y las hembras solían estar dentro del área de campeo de más de un macho. Estos patrones de uso del espacio y parentesco sugieren que los machos monopolizan el espacio más que las hembras, y que el sistema de apareamiento del perezoso de dos dedos de Hoffmann implica una mezcla de poliginia y promiscuidad. Los machos vecinos estaban más emparentados de lo esperado, lo que sugiere que un cierto nivel de tolerancia entre los machos puede provenir de los beneficios de la selección de parentesco y de la capacidad limitada de los machos para monopolizar las oportunidades de reproducción.