Revisado médicamente por Drugs.com. Last updated on Jan 22, 2021.
- Guía de salud
¿Qué es un esguince de rodilla?
Un esguince de rodilla es una lesión de los ligamentos, bandas resistentes de tejido fibroso que conectan los huesos de la parte superior e inferior de la pierna en la articulación de la rodilla. La articulación de la rodilla tiene cuatro ligamentos principales.
- Ligamento cruzado anterior (LCA) – El LCA y el ligamento cruzado posterior (LCP) tienden un puente en el interior de la articulación de la rodilla, formando un patrón en “X” que estabiliza la rodilla contra las fuerzas de adelante hacia atrás y de atrás hacia adelante. El LCA se suele torcer durante uno de los siguientes movimientos de la rodilla: una parada repentina; un giro, pivote o cambio de dirección en la articulación; una sobrecarga extrema (hiperextensión); o un impacto directo en la parte exterior de la rodilla o la parte inferior de la pierna. Estas lesiones se dan en atletas de fútbol, baloncesto, fútbol, rugby, lucha, gimnasia y esquí.
- Ligamento cruzado posterior (LCP) – El LCP trabaja con el LCA para estabilizar la rodilla. La mayoría de las veces se tuerce a causa de un impacto directo en la parte delantera de la rodilla, como cuando se golpea la rodilla contra el salpicadero en un accidente de coche o cuando se aterriza con fuerza sobre una rodilla doblada al practicar un deporte. En los atletas, las lesiones del LCP son más comunes entre los que juegan al fútbol, al baloncesto, al fútbol y al rugby.
- Ligamento colateral medial (LCM) – El LCM sostiene la rodilla a lo largo del lado interno de la pierna. Al igual que el LCA, el LCM puede romperse por un golpe lateral directo en la parte exterior de la rodilla o la parte inferior de la pierna, el tipo de golpe que puede producirse en el fútbol, el hockey y el rugby. El LCM puede lesionarse por una fuerte torsión de la rodilla durante el esquí o la lucha, especialmente cuando una caída tuerce la parte inferior de la pierna hacia fuera, alejándola de la parte superior.
- Ligamento colateral lateral (LCL): el LCL sostiene la parte exterior de la rodilla. Es el ligamento de la rodilla con menos probabilidades de sufrir un esguince porque la mayoría de las lesiones del LCL se producen por un golpe en la parte interna de la rodilla, y esa zona suele estar protegida por la pierna contraria.
Al igual que otros tipos de esguinces, los esguinces de rodilla se clasifican según un sistema de clasificación:
- Grado I (leve) – Esta lesión estira el ligamento, lo que provoca desgarros microscópicos en el mismo. Estos pequeños desgarros no afectan significativamente a la capacidad general de la articulación de la rodilla para soportar su peso.
- Grado II (moderado) – El ligamento está parcialmente desgarrado, y hay cierta inestabilidad leve o moderada (o cesión periódica) de la rodilla al estar de pie o al caminar.
- Grado III (grave) – El ligamento se rompe completamente o se separa en su extremo del hueso, y la rodilla es más inestable.
Cuando un ligamento de la rodilla sufre un esguince grave, hay muchas posibilidades de que otras partes de la rodilla también se lesionen. Por ejemplo, dado que el LCM ayuda a proteger el LCA de ciertos tipos de fuerzas extremas de la rodilla, el LCA puede ser vulnerable a las lesiones cuando el LCM se desgarra. En más de la mitad de los esguinces moderados o graves del LCM, el LCA también sufre un esguince.
Los esguinces de rodilla son muy comunes. Los esguinces del LCA tienden a causar síntomas más importantes en comparación con las lesiones del LCM. Muchos esguinces del LCM son tan leves que no dan lugar a una visita al médico.
Más que cualquier otro grupo, los atletas de competición tienen un riesgo muy alto de sufrir esguinces de rodilla y otros tipos de problemas de rodilla. En los institutos de Estados Unidos, la rodilla es la articulación que se lesiona con más frecuencia entre los atletas que compiten en fútbol americano, fútbol o lucha libre.
Síntomas
Los síntomas de un esguince de rodilla varían en función del ligamento específico que se rompa:
Esguince del LCA
- Un chasquido en el interior de la rodilla en el momento de la lesión
- Inflamación significativa de la rodilla a las pocas horas de la lesión
- Dolor intenso en la rodilla que le impide seguir practicando su deporte
- Dolor negroy azul alrededor de la rodilla
- Instabilidad de la rodilla – la sensación de que su rodilla lesionada se doblará o cederá si intenta ponerse de pie
Esguince del LCP
- Inflamación leve de la rodilla, con o sin inestabilidad de la rodilla
- Dificultad leve para mover la rodilla
- Dolor leve en la parte posterior de la rodilla que empeora al arrodillarse
Esguince del LCM
- Dolor e hinchazón de la rodilla
- Devolución de la rodilla hacia el exterior
- Un área de sensibilidad sobre el LCM desgarrado (en el lado interno de la rodilla)
Esguince del LCL
- Dolor e hinchazón de la rodilla
- Flexión de la rodilla hacia el interior
- Un área de sensibilidad sobre el LCL desgarrado (en el lado externo de la rodilla)
Diagnóstico
Su médico querrá saber exactamente cómo se lesionó la rodilla. Él o ella le preguntará sobre:
- El tipo de movimiento que causó la lesión (parada repentina, giro, pivote, hiperextensión, contacto directo)
- Si sintió un chasquido en el interior de la rodilla cuando se produjo la lesión
- Cuánto tiempo tardó en aparecer la inflamación
- Si un dolor intenso en la rodilla le dejó fuera de juego inmediatamente después de la lesión
- Si su rodilla se sintió inmediatamente inestable y no podía soportar peso
El médico le examinará ambas rodillas, comparando la rodilla lesionada con la no lesionada. Durante este examen, el médico comprobará si la rodilla lesionada presenta signos de hinchazón, deformidad, sensibilidad, líquido dentro de la articulación de la rodilla y decoloración. Si no tiene demasiado dolor ni hinchazón, el médico evaluará la amplitud de movimiento de la rodilla y tirará de los ligamentos para comprobar su resistencia. Durante el examen, usted doblará la rodilla y el médico tirará suavemente hacia delante o empujará hacia atrás la parte inferior de su pierna donde se une con la rodilla.
Si los resultados de su examen físico sugieren que tiene una lesión importante en la rodilla, necesitará pruebas de diagnóstico para evaluar más a fondo su rodilla. Éstas pueden incluir radiografías estándar para comprobar la separación del ligamento del hueso o la fractura. Las pruebas también pueden incluir una resonancia magnética (RM) o una cirugía de rodilla guiada por cámara (artroscopia).
Duración prevista
La duración de un esguince de rodilla depende del tipo de esguince de rodilla, de la gravedad de su lesión, de su programa de rehabilitación y de los tipos de deportes que practique. En general, los esguinces de grado I y grado II del LCM o del LCL se curan en un plazo de 2 a 4 semanas, pero otros tipos de esguinces de rodilla pueden tardar de 4 a 12 meses.
Prevención
Para ayudar a prevenir las lesiones de rodilla relacionadas con el deporte, puede:
- Calentar y estirar antes de participar en actividades deportivas.
- Realizar ejercicios para fortalecer los músculos de las piernas alrededor de la rodilla, especialmente los cuádriceps.
- Evitar aumentos repentinos en la intensidad de su programa de entrenamiento. Nunca se esfuerce demasiado, ni demasiado rápido. Aumente su intensidad gradualmente.
- Utilice un calzado cómodo y de apoyo que se adapte a sus pies y a su deporte. Si tiene problemas de alineación del pie que puedan aumentar el riesgo de torcedura de rodilla, pregunte a su médico sobre las plantillas que pueden corregir el problema.
- Si juega al fútbol, pregunte a su médico deportivo o a su entrenador de atletismo sobre los tipos específicos de tacos que pueden ayudar a reducir el riesgo de lesiones de rodilla.
- Si esquía, utilice fijaciones de liberación de dos modos que estén correctamente instaladas y ajustadas. Asegúrese de que el mecanismo de fijación está en buen estado de funcionamiento y de que sus botas y fijaciones son compatibles.
Tratamiento
Si tiene un esguince de rodilla de grado I o grado II, su médico probablemente le recomendará que siga la regla RICE:
- Descanse la articulación.
- Hielo en la zona lesionada para reducir la hinchazón.
- Comprima la hinchazón con una venda elástica.
- Eleve la rodilla lesionada.
Su médico puede sugerirle que lleve una rodillera durante un breve período de tiempo y que tome un medicamento antiinflamatorio no esteroideo (AINE), como el ibuprofeno (Advil, Motrin y otros), para aliviar el dolor y la hinchazón. A medida que el dolor de rodilla vaya desapareciendo, el médico le recetará un programa de rehabilitación para fortalecer los músculos que rodean la rodilla. Este programa debería ayudar a estabilizar la articulación de la rodilla y evitar que se vuelva a lesionar.
Si tiene un esguince de rodilla de grado III o si se han lesionado varios ligamentos, el tratamiento depende del tipo específico de esguince:
- Esguince del LCA o del LCP de grado III: su ligamento roto puede reconstruirse quirúrgicamente utilizando un trozo de su propio tejido (autoinjerto) o un trozo de tejido de un donante (aloinjerto). Casi todas las reconstrucciones de rodilla utilizan una cirugía guiada por cámara (artroscópica).
- Esguince del LCM de grado III: esta lesión suele tratarse de forma conservadora con RICE, AINE (como el ibuprofeno) y fisioterapia. En algunos casos, puede recurrirse a la cirugía para reparar un LCM desgarrado.
- Esguince del LCL de grado III: en un esguince grave del LCL, el ligamento desgarrado suele repararse quirúrgicamente.
- Lesión simultánea de varios ligamentos: su médico le explicará las distintas opciones quirúrgicas disponibles.
Cuándo llamar a un profesional
Si se lesiona la rodilla, llame a su médico para solicitar una evaluación urgente si la rodilla:
- Se vuelve muy dolorosa o hinchada
- No puede soportar peso
- Se siente como si fuera a doblarse o ceder
Pronóstico
Alrededor del 90% de las personas con lesiones del LCA y el 80% con lesiones del LCP pueden esperar una recuperación completa después de un tratamiento adecuado y un buen programa de fisioterapia. Casi todos los esguinces del LCM y la mayoría de los esguinces del LCL tienen un pronóstico excelente.
Como complicación a largo plazo, algunas personas con esguinces del LCA o del LCP acaban desarrollando dolor por artrosis en la articulación de la rodilla lesionada. Este síntoma puede no comenzar hasta muchos años después de la lesión inicial de la rodilla.
Recursos externos
Instituto Nacional de Artritis y Enfermedades Musculoesqueléticas y de la Piel
http://www.niams.nih.gov/
Centro Nacional de Información sobre Rehabilitación (NARIC)
http://www.naric.com/
Sociedad Ortopédica Americana para la Medicina del Deporte
http://www.sportsmed.org/
Academia Americana de Cirujanos Ortopédicos (AAOS)
http://orthoinfo.aaos.org/
Asociación Nacional de Entrenadores de Atletismo
http://www.nata.org/
Asociación Americana de Fisioterapia
http://www.apta.org/