Vanessa Paradis y Winona Ryder no se creen las acusaciones de violencia doméstica vertidas contra Johnny Depp por su ex mujer Amber Heard. Y han saltado al terreno de juego en la demanda por difamación interpuesta por el actor estadounidense en Londres contra el tabloide británico Sun -que le tachó de “maltratador conyugal” en 2018- para defenderle a capa y espada en su experiencia como amigos y sus antiguos compañeros históricos.
El testimonio más decisivo -en una nueva vista de un caso que se ha convertido en un enfrentamiento sin cuartel en los últimos días sobre la historia de la breve vida en común de Depp y Heard, con acusaciones cruzadas sobre quién fue la víctima y quién el agresor en una relación empañada por el alcohol y las drogas- vino de la mano de Paradis. Paradis recordó que conocía a Johnny Depp desde hacía 25 años, que había sido “su pareja durante 14 años, que había criado a dos hijos con él” y que le conocía como una persona “generosa, cariñosa, amable y no violenta”. Paradis también calificó las acusaciones en su contra como ‘indignantes’.
Winona Ryder, por su parte, dijo que ‘obviamente no estuvo presente’ en los acontecimientos del matrimonio de Depp y Heard. Sin embargo, afirmó que sigue considerándolo su “mejor amigo, ya que son pareja desde hace cuatro años”, y que nunca ha sido objeto de su comportamiento “agresivo”. “No quiero llamar mentiroso a nadie”, concluyó, “pero por mi experiencia con Johnny, me resulta imposible creer que ciertas horribles acusaciones sean ciertas.