Cada vez que Becky se olvida de una palabra o pierde las llaves teme tener la enfermedad de Alzheimer. A sus 63 años, Becky entiende que no se la considera una persona mayor y trata de ignorar sus fallos de memoria como “momentos de la tercera edad”. Teniendo en cuenta todo lo que ha leído sobre el aumento de la tasa de demencia, se pregunta si sus fallos de memoria son normales o un presagio de la aparición de la enfermedad de Alzheimer.
La importancia de la detección de la memoria
El Instituto Nacional de la Salud señala que la incidencia de la demencia se duplica cada 5 años entre los 65 y los 90 años. Los Centros para el Control de Enfermedades afirman que la enfermedad de Alzheimer se cuadruplicará para el año 2050, ya que un mayor número de personas sobreviven lo suficiente como para tener un mayor riesgo de demencia. Harvard Health señala que el diagnóstico de la demencia ha aumentado a medida que han mejorado las pruebas para detectar la enfermedad. No hay estudios que indiquen que la tasa de demencia y Alzheimer esté aumentando debido a otros factores. Lo que sí han demostrado los estudios es que la detección precoz de la pérdida de memoria, la demencia y la enfermedad de Alzheimer y su causalidad puede repercutir en mejores resultados para los pacientes.
La Alzheimer’s Foundation of America recomienda la realización de “chequeos cerebrales saludables” anuales como parte de nuestro chequeo médico anual o como complemento del mismo. Hay muchas razones subyacentes físicas o mentales comunes para la pérdida cognitiva que son tratables si se abordan. Problemas de salud como una irregularidad del tiroides, una deficiencia vitamínica, la depresión, la falta de sueño, los efectos secundarios de la medicación, la deshidratación o la desnutrición pueden afectar a la memoria y la cognición. Si los resultados de las pruebas de memoria muestran signos de deterioro cognitivo, es importante determinar la causa del problema programando una revisión con su médico u otro profesional sanitario.
¿Qué es un examen de memoria y dónde se realiza?
Los exámenes de memoria, llamados Mini Examen del Estado Mental o MMSE, no son invasivos. La prueba consiste en preguntas básicas que incluyen recordar algunas palabras o contar hacia atrás en grupos de números. También se le puede pedir que escriba una frase o que copie un dibujo. La prueba de memoria dura unos diez minutos y la realiza un profesional sanitario cualificado. Pregunte a su médico o profesional sanitario si realiza pruebas de memoria. Las pruebas de memoria caseras o en línea no se recomiendan para diagnosticar con precisión la pérdida de memoria o la causa de la pérdida de memoria.
El Programa Nacional de Evaluación de la Memoria de la Fundación de Alzheimer de Estados Unidos
ofrece evaluaciones de la memoria gratuitas y confidenciales en todo el país y ha evaluado a más de 4 millones de personas hasta la fecha.
Beneficios de la evaluación temprana de la memoria
Al principio, la evaluación temprana de la memoria puede proporcionar una puntuación de referencia para futuras pruebas. Los beneficios también incluyen una disminución de la ansiedad para aquellos que temen que su pérdida de memoria sea un signo de demencia.
El diagnóstico temprano de los síntomas de demencia, o de la enfermedad de Alzheimer, le permite ser proactivo en su tratamiento y en la planificación de su vida y cuidados. Proporciona una oportunidad para educar a los cuidadores, abordar la conducción, la cocina, la posesión de armas, la administración de medicamentos y otras cuestiones de seguridad para el paciente y la familia.
La Alzheimer’s Foundation of America afirma que “la detección temprana del deterioro cognitivo leve (DCL) puede permitir a una persona la oportunidad de aprovechar los tratamientos que pueden ralentizar los cambios en la memoria y las habilidades de pensamiento o participar en un ensayo clínico.”
¿Quién debe someterse a las pruebas de detección?
La detección temprana de la memoria es beneficiosa para aquellos que han experimentado una pérdida de memoria relacionada con la edad o tienen 65 años o más. El Instituto Nacional de la Salud afirma que “el cribado de la demencia en el ámbito clínico es claramente apropiado para aquellos cuyo riesgo está por encima de un determinado umbral, por ejemplo, las personas mayores de 75 años”.
Hable con su médico o profesional sanitario si ha experimentado una pérdida de memoria que parece inusual, como perderse en lugares conocidos, olvidarse de cómo realizar actividades normales, o si su familia o amigos notan cambios en su estado de ánimo, comportamiento o personalidad. Para obtener una breve lista de preguntas a tener en cuenta para determinar si debe programar una evaluación de la memoria, visite alzfdn.org.
Cuidado de la memoria en Green Hill
Green Hill proporciona una serie de servicios de vida para personas mayores, incluidos aquellos con problemas de memoria, en un entorno de vida seguro con seguridad y supervisión las 24 horas del día.
Los servicios de apoyo al cuidado de la memoria de Green Hill ayudan a la administración de la medicación, proporcionan tres comidas nutritivas al día, y cuentan con un programa de bienestar especializado con un centro de fitness, y el Club Connect – actividades de memoria y programación con un terapeuta de recreación en nuestra residencia de vida asistida.
Este artículo es sólo para fines informativos y no pretende ser un sustituto del asesoramiento médico profesional. Busque siempre el consejo de su médico con respecto a una condición o tratamiento médico y antes de emprender un nuevo régimen de cuidado de la salud.