¿Por qué los pacientes inmunocomprometidos tienen más infecciones que otros pacientes?

El sistema inmunitario del organismo utiliza una serie de defensas para prevenir o eliminar las infecciones. Las infecciones pueden ser causadas por diversos organismos, como bacterias, virus u hongos. El sistema inmunitario puede verse debilitado (inmunocomprometido) por una serie de enfermedades y sus tratamientos. Estos son algunos ejemplos de lo que puede debilitar las defensas inmunitarias del organismo:

• Destrucción de la piel, del revestimiento de la boca o del resto del tracto gastrointestinal. Esto puede ocurrir como efecto secundario de los medicamentos, debido a la radiación utilizada para el tratamiento del cáncer, o por otras razones.
• Disminución del número de células que combaten las infecciones, como los glóbulos blancos. Esto puede ser causado por ciertos tipos de cáncer o como efecto secundario de los medicamentos utilizados para el tratamiento del cáncer.
• Presencia de objetos extraños como catéteres (tubos) venosos o urinarios. Los pacientes con estos dispositivos deben tener cuidado para evitar la infección.

¿Por qué son peligrosas las infecciones en pacientes inmunodeprimidos?

• Los síntomas habituales pueden estar ausentes. Los pacientes con sistemas inmunitarios débiles pueden no mostrar los signos clásicos de infección, como el enrojecimiento y la hinchazón en el lugar de la infección. A veces, el único síntoma de una infección puede ser la fiebre.
• La infección puede avanzar rápidamente. En ausencia de glóbulos blancos que combatan la infección, ésta puede progresar rápidamente desde la fiebre sola hasta la sepsis y la muerte. Por esta razón, se pide a los pacientes con sistemas inmunitarios débiles que tienen recuentos bajos de glóbulos blancos que informen de inmediato si tienen fiebre. Estos pacientes suelen ser hospitalizados si tienen fiebre, para que puedan recibir tratamiento con antibióticos intravenosos (IV).
• Sus sistemas pueden no responder rápidamente a la infección. Los pacientes con sistemas inmunitarios débiles pueden tener problemas para eliminar las infecciones de su organismo. Por ejemplo, una infección vírica como la “gripe” puede tardar más tiempo en desaparecer de un paciente con un sistema inmunitario débil en comparación con una persona con un sistema inmunitario sano.

¿Cómo pueden prevenirse las infecciones en pacientes inmunodeprimidos?

Estos son los principios generales para prevenir las infecciones en pacientes con sistemas inmunitarios débiles:

• Practique una buena higiene de manos. Muchas infecciones se propagan a partir de bacterias o virus que recogemos en nuestras manos cuando tocamos a las personas u objetos que nos rodean. Limpiarse las manos con frecuencia (lavándolas con agua y jabón o utilizando un desinfectante de manos a base de alcohol) es la mejor manera de prevenir la propagación de infecciones.
• Evite el contacto con personas enfermas. Incluso un virus del resfriado común puede hacer que un paciente con un sistema inmunitario débil se ponga muy enfermo.
• Vacúnese. Los cuidadores de pacientes con sistemas inmunitarios débiles deben recibir todas las vacunas recomendadas, incluidas las de la gripe y la tos ferina. Los pacientes también deben recibir estas vacunas siempre que sus médicos lo recomienden.

¿Cuáles son las tasas de supervivencia de los pacientes con sistemas inmunitarios débiles que contraen una infección?

Debido a que en los pacientes con sistemas inmunitarios débiles pueden aparecer tantas enfermedades, afecciones e infecciones diferentes, no se dispone de tasas de supervivencia ampliamente útiles.

En general, las perspectivas de supervivencia de los pacientes con sistemas inmunitarios débiles que desarrollan infecciones dependen de la razón por la que el sistema inmunitario está comprometido y del tipo de infección presente.

La prevención y el tratamiento agresivo de las infecciones son pasos críticos para garantizar el éxito del tratamiento del cáncer.

¿Cuándo se inició el Programa de Enfermedades Infecciosas de St. Jude y qué ofrece?

• El Programa de Enfermedades Infecciosas de St. Jude comenzó cuando este hospital abrió por primera vez sus puertas a los pacientes en 1962. Desde entonces, el programa ha pasado de un médico especialista en enfermedades infecciosas a nueve consultores a tiempo completo. Son expertos en el tratamiento de infecciones en niños gravemente inmunodeprimidos, incluidos los que se someten a trasplantes de células madre/médula ósea.
• Los científicos del Centro de Defensa de las Infecciones Infantiles de St. Jude trabajan para desarrollar nuevos agentes y descubrir nuevas terapias para prevenir y tratar las infecciones y las enfermedades infecciosas.
• Como hospital de investigación, los médicos de St. Jude tienen acceso a las terapias más actualizadas y pueden administrar tratamientos diseñados específicamente para cada paciente.