La Academia Americana de Pediatría ha modificado sus directrices anteriores sobre el tiempo de pantalla para bebés y niños pequeños. La AAP dice ahora que es aceptable que los bebés hablen por Skype o FaceTime con familiares lejanos y que los niños mayores y los adolescentes hagan parte de su socialización, aprendizaje y juego en línea. Sin embargo, la AAP sostiene que estas actividades no son tan importantes como el sueño, el ejercicio, la alimentación, la conversación y la interacción cara a cara con los demás, y que deben cesar. El nuevo conjunto de directrices sustituye a las antiguas recomendaciones de que los niños menores de 2 años eviten todas las pantallas y de que los niños mayores y los adolescentes utilicen los medios digitales durante no más de una o dos horas al día.
Los médicos siguen pidiendo a los padres que establezcan límites sobre cuándo, dónde y durante cuánto tiempo los niños pueden estar enchufados, pero reconocen que los medios electrónicos tienen beneficios y riesgos.
El tiempo en ordenadores, teléfonos, tabletas y otros dispositivos “no es malo, no hay que evitarlo”, dijo Megan Moreno, profesora asociada de medicina de adolescentes en el Hospital Infantil de Seattle y autora de la guía. “Los pediatras mantuvieron la recomendación de no usar pantallas para los niños menores de 18 a 24 meses, con una excepción: el videochat. Hablar con familiares lejanos a través de servicios como Skype y FaceTime puede ayudar a construir relaciones, dicen los médicos. Siguen manteniendo que hay pocas pruebas de que los bebés puedan entender o beneficiarse de ver la televisión, usar aplicaciones o participar en otras actividades en línea.
Si los padres quieren introducir programas y aplicaciones a los niños de 18 a 24 meses es importante que los padres jueguen e interactúen con ellos. Los teléfonos, iPads y otros dispositivos no deben sustituir la interacción de los padres y convertirse en niñeras “gratuitas”. De los dos a los cinco años, los médicos recomiendan una hora o menos al día e instan a los padres a seguir participando y a elegir solo programación de alta calidad de fuentes como PBS Kids y Sesame Workshop.
Las directrices instan a las familias con niños mayores a establecer límites mediáticos en un día que debe incluir al menos una hora de actividad física y un sueño adecuado (de 8 a 12 horas, dependiendo de la edad), así como tiempo familiar de calidad. Estos límites reducirán los riesgos, como la obesidad, la pérdida de sueño y el deterioro del rendimiento escolar, al tiempo que permitirán a los niños conectarse en línea con sus amigos y familiares y conocer el mundo en general.
Los médicos también recomiendan a los padres:
– Prohibir los dispositivos y las televisiones una hora antes de acostarse y en los dormitorios durante la noche. La luz y el ruido pueden interrumpir el sueño.
– Desaconsejar el uso de medios de entretenimiento durante el tiempo de los deberes. Se ha demostrado que esa multitarea interfiere en el aprendizaje.
– Designe lugares y momentos libres de medios (como la hora de la cena) para todos los miembros de la familia, incluidos los adultos.
– Siga vigilando lo que ven los niños y hable con ellos sobre el acoso en línea, el sexting y otros peligros.