Hoteles y villas de lujo, vida nocturna chispeante, boutiques exclusivas, aperitivos elegantes y restaurantes finos. La Costa Esmeralda es el centro vacacional más glamuroso de Cerdeña. Dos peñascos con su nombre le dan la bienvenida a su llegada, uno en el extremo sur, en la carretera que va de Olbia a los lugares más famosos, y otro en el norte, en la carretera que lleva al azul brillante de la Baja Cerdeña. La Costa Esmeralda nació del consorcio fundado por el príncipe ismaelita Karim Aga Khan en 1962, e invita a disfrutar de la buena cocina, las grandes compras y el estilo de vida suave y lujoso que distingue al corazón de Porto Cervo, entre Golfo Pevero, Pantogia y Capriccioli.
Su elegante arquitectura es característica: edificios pequeños, bajos y blancos, de líneas suaves, que se mezclan maravillosamente con la vegetación mediterránea que los rodea, como la iglesia de Stella Maris, diseñada por Michele Busiri Vici.
La fama de la Costa Esmeralda se debe en gran parte también a algunos de sus inestimables atractivos naturales cercanos, como Cala di Volpe, un exclusivo puerto natural donde se rodaron algunas escenas de la película de James Bond La espía que me amó.
Otros lugares célebres son Grande Pevero, Liscia di Vacca, rodeada de matorrales mediterráneos y bendecida con aguas turquesas, Liscia Ruja, con sus ensenadas enmarcadas por fragantes arbustos de enebro, Romazzino, con su mar transparente y sus playas blancas, y Pitrizza.
Las hermosas bahías con velas blancas atraen la mirada hacia las playas y las pequeñas islas, como la isola dei Cappuccini, la isla de Bisce, al sur de Caprera, Li Nibani, la isla de Mortorio, las pequeñas islas delle Camere y la isola di Soffi. A lo largo de la costa se encuentra el Instituto de Investigación del Delfín Mular, un instituto internacional creado para estudiar y salvaguardar a estos especiales delfines.
En los alrededores se encuentran diversos yacimientos arqueológicos de gran interés, como la necrópolis de Li Muri (en la zona de Arzachena), que data de mediados del siglo IV a.C., los complejos nurágicos de Malchittu y de Albucciu, que cuentan con nuraghe, tumbas gigantes, poblados de cabañas y la gigantesca tumba de Coddu Vecchiu (III-II milenio a.C.).