RESULTADOS Y DISCUSIÓN
En este estudio participaron un total de 41 enfermeros. La mayoría de los participantes eran mujeres (76%), lo cual es común en la enfermería debido a los acontecimientos históricos. La división social de las prácticas de enfermería otorgó a las mujeres la responsabilidad de cuidar a los pacientes, los niños y los ancianos(11). La edad de los participantes oscilaba entre 24 y 46 años, con predominio de los jóvenes (44% tenían entre 24 y 30 años). El periodo medio de formación fue de uno a cinco años, con un máximo de 20 años. En relación con los estudios, el 83% de los profesionales había realizado un curso de postgrado, con predominio de la Terapia Intensiva (29%).
Respecto a los indicadores de calidad de los cuidados de enfermería, sólo el 54% de las enfermeras había utilizado este método para orientar sus prácticas. Curiosamente, el 46% de las enfermeras afirmaron que recogían y analizaban los indicadores, pero no hacían uso de las evaluaciones de resultados para implementar mejoras en los sectores en los que trabajaban. Afirmaron utilizar las métricas, pero no emplearon un enfoque cualitativo para los fenómenos investigados.
Los principales indicadores de calidad de los cuidados de enfermería utilizados por las enfermeras de ambas instituciones se muestran en la Tabla 1, y el 100% de estos indicadores se clasifican como indicadores de proceso.
Tabla 1. Principales indicadores de calidad de los cuidados de enfermería utilizados por las enfermeras de dos hospitales escuela del interior de Minas Gerais, Brasil, 2013
Indicadores de calidad de los cuidados de enfermería | Porcentaje (%) |
Tipo |
---|---|---|
Incidencia de úlceras por presión | 18% | Proceso |
Incidencia de pérdida de Naso-Sondas de alimentación enteral gástrica | 15% | Proceso |
Tasa de infección de catéteres urinarios permanentes | 15% | Proceso |
Incidencia de extubación accidental | 11% | Proceso |
Incidencia de caídas de pacientes | 11% | Proceso |
Tasa de infección por catéter venoso central | 7% | Proceso |
Fuente: Datos de la investigación, 2013.
Se observa que, según el CQH, los indicadores de calidad creados para las buenas prácticas de enfermería se pueden aplicar y pueden retratar la realidad de los servicios de enfermería. Además, una evaluación requiere un número mínimo de indicadores que puedan revelar las principales características de la realidad del servicio de salud y sus prácticas(12). Cabe mencionar que los indicadores clave identificados se definen como datos o información numérica que busca cuantificar el desempeño de los servicios y procesos de enfermería. No se reportaron indicadores que evalúen la estructura o los resultados de los servicios prestados.
Respecto a la opinión de las enfermeras sobre la importancia de utilizar indicadores de calidad de los cuidados de enfermería, las participantes destacaron los siguientes elementos constitutivos en sus declaraciones: evaluar el servicio prestado, mejorar la calidad de los cuidados y definir estrategias para alcanzar las metas.
La categoría evaluar los cuidados de enfermería se puso de manifiesto en las siguientes afirmaciones:
Creo que es importante poder evaluar nuestro propio trabajo, para ver cómo está siendo aceptado también por los demás, si está funcionando (1).
Porque utilizas el indicador para evaluar la calidad de tu servicio. ¿Estás proporcionando un servicio de calidad? ¿Qué se puede mejorar? ¿Qué está funcionando bien? El indicador te mostrará todo esto(9).
Nos sirve de medidor de calidad. Estos indicadores nos ayudan a ver cómo avanza ese trabajo, cómo se administra, cuáles son las respuestas(12).
Los indicadores se consideran instrumentos para medir la calidad de la asistencia sanitaria porque ayudan a identificar fallos en el proceso, pero la acción de medir por sí sola no es suficiente. Debe ser el primer paso para establecer estándares de excelencia y la mejora continua de la atención. Según la JCAHO, los indicadores pueden servir de guía para supervisar y evaluar los cuidados y las actividades de un servicio(1). Las enfermeras demostraron tener una comprensión correcta de la importancia real de los indicadores de calidad, como se ilustra a continuación:
Creo que… analizan mejor los estándares, por así decirlo. Tienen que tener una aplicación práctica. Según mi experiencia, a menudo algunos indicadores se crean con fines científicos, para recoger datos. Pero no se centran necesariamente en la calidad de los cuidados(29).
Creo que no sirve de nada limitarse a recopilar indicadores si no tenemos, digamos, una utilidad real para ellos(37).
Sin embargo, se observó que las enfermeras no siempre utilizan los indicadores para mejorar los cuidados, y parecen estancarse en la fase de recopilación o de seguimiento y análisis sin llegar a la fase de implementación de acciones. Las mediciones no deben considerarse un mero ejercicio metodológico interesante. Deben permitir la mejora de las prácticas sanitarias estableciendo estándares de trabajo y puntos de referencia para mejoras continuas(13).
Otra categoría identificada en las declaraciones de las enfermeras sobre la importancia de utilizar indicadores de calidad fue la mejora de la calidad de los cuidados. A continuación, algunas de las declaraciones:
Es útil porque ayuda a mejorar nuestra rutina, a mejorar el servicio que prestamos a los pacientes, creo que mucho es válido(10).
Al analizar los indicadores, se pueden ver los puntos que tenemos que mejorar, los puntos que no tenemos que mejorar, completar un proceso de evaluación, lo que está funcionando, lo que no está funcionando, lo que podemos mejorar, los puntos críticos(13).
Desde mi punto de vista, la importancia de utilizarlos es… que podemos detectar los puntos que debemos perfilar, los puntos en los que debemos hacer hincapié o incluso para corregir errores, mejorar la atención que vamos a prestar, así tomamos conciencia de los riesgos para nuestros pacientes y nuestras prácticas pueden mejorar(27).
Es muy importante, ayuda a mejorar la atención. El problema es que se evalúan los indicadores, pero no siempre se llevan a cabo. Es realmente importante. Porque es una herramienta y un instrumento que podemos utilizar para mejorar los cuidados(32).
Las enfermeras mostraron que son conscientes de que los indicadores son instrumentos para mejorar las prácticas asistenciales y controlar la calidad de la asistencia. Sin embargo, parecían incapaces de incorporar todas las etapas de la gestión de los indicadores y no siempre sabían qué hacer con las cifras. Cabe señalar que la voluntad de mejorar la calidad de la asistencia debe ser una actitud colectiva y no una actitud aislada. Para ello es necesario implantar una política de calidad en las organizaciones y un mayor compromiso a nivel directivo.
Los indicadores de calidad son herramientas que pueden utilizarse para mejorar la calidad de los cuidados mediante la identificación de los factores que intervienen en los procesos de trabajo de los equipos de enfermería. Esta identificación puede orientar las acciones para revertir el escenario detectado y apoyar el análisis del incumplimiento de los estándares que se consideran deseables. También puede orientar la atención hacia los puntos clave de los cuidados que deben ser revisados(14).
La categoría que define las estrategias para alcanzar las metas surgió de las siguientes afirmaciones:
Tenemos metas en los indicadores. Si no hemos alcanzado la meta, tenemos que saber por qué no la hemos alcanzado y encontrar una justificación. Correcto… Tenemos que explicar por qué no alcanzamos la meta. Y tratar de mejorar(15).
Entonces, cuando sólo depende de la atención, necesitamos un análisis crítico y hacemos sugerencias, y a partir de esas sugerencias trabajamos y tratamos de alcanzar las metas. Es una guía que me ayuda a analizar lo que está funcionando, lo que puedo mejorar, lo que depende de los cuidados, lo que depende del hospital, cuál es mi meta, e influye directamente en la calidad de la atención(16).
Hay que tener en cuenta que la información obtenida con los indicadores de calidad puede ser utilizada para las posteriores evaluaciones y ajustes de metas que apunten a la mejor calidad posible y resulten en una mejor gestión(15). La aplicación de los indicadores debe considerarse un factor crítico para la gestión y para la transformación de la asistencia sanitaria, la educación y la investigación. La información extraída de estos datos ayuda a reconocer, documentar y evaluar una situación determinada y a apoyar la toma de decisiones. La comparación interna, como entre sectores, y la externa, entre diferentes servicios, ayuda a revisar los objetivos y las decisiones presentes y futuras(15).
Los enunciados revelan las dificultades que encuentran las enfermeras cuando utilizan los indicadores de calidad en los servicios de enfermería. Los enunciados permitieron detectar los siguientes elementos constitutivos: falta de tiempo, número inadecuado de profesionales y desconocimiento del tema.
Las enfermeras consideraron la falta de tiempo como un factor que dificulta la implementación de todas las etapas de la gestión de indicadores:
Últimamente se trata más de tener tiempo para sentarnos y hacerlo realmente. Porque, en este caso, somos responsables de tres sectores durante la semana. Llega el fin de semana y somos responsables de cinco sectores, así que nos resulta difícil sentarnos y hacerlo(2).
Cuando la presión aumenta, consigo sentarme y rellenar los números, pero no tengo tiempo para pensar en los datos(12).
Son muchos formularios que rellenar. Tenemos demasiado papeleo. Es difícil, porque a veces se necesita un tiempo que no tenemos, pero eso es todo realmente(15).
A veces, es una cuestión de tiempo, y tenemos que atender las cosas urgentes y las que no son urgentes se dejan en un segundo plano(31).
Las declaraciones mostraron que el mayor reto no es simplemente comprender la importancia de los indicadores o de obtener buenos indicadores, sino mantenerlos y mejorarlos. El debate sobre la falta de tiempo puede estar relacionado con las exigencias de la atención que requieren los pacientes y el número de profesionales contratados por las instituciones(16). En este contexto, otro aspecto frecuentemente mencionado fue el número inadecuado de profesionales, lo que revela una excesiva carga de trabajo que afecta directamente a los resultados de la calidad asistencial.
Es bastante difícil en nuestro sector porque sólo hay dos enfermeras (3).
La carga de trabajo aquí es enorme. Tenemos que ocuparnos de todo el sector. No tenemos tiempo para hacer esas pequeñas cosas (4).
Puedo hablar de mi sector, y la carga de trabajo es enorme…. (5).
A veces, tenemos que trabajar de secretarias y atender el teléfono, hablar con la familia porque a veces no hay psicólogo ni otros profesionales(39).
La carga de trabajo del personal de enfermería y la falta de trabajadores compromete la calidad, lo que repercute en la tasa de infección y la tasa de mortalidad(17).
El reducido número de trabajadores en la unidad de enfermería se considera un obstáculo para la utilización de indicadores de calidad y para la realización de otras actividades en el proceso de trabajo. Un estudio realizado en el centro quirúrgico de un gran hospital identificó que un número reducido de enfermeras dificulta la sistematización de los cuidados de enfermería perioperatorios(18). A la luz de tantas evidencias, se observó que un número reducido de profesionales de enfermería impide la implementación de acciones de calidad y seguridad. Por lo tanto, la administración de las instituciones debería ser más consciente de esta demanda para causar un impacto más positivo para la institución, sus profesionales y sus usuarios.
Otra dificultad mencionada por las enfermeras fue el desconocimiento de los indicadores. Los participantes señalaron que tenían dificultades para utilizar los indicadores de calidad porque no sabían cómo aplicarlos. Por lo tanto, los indicadores deben ser fáciles de entender para los usuarios de la información. La importancia de la utilización de los indicadores se justifica por la necesidad de monitorear y medir sus resultados, para verificar la alineación con los objetivos de la institución, y la posibilidad de evaluar las acciones planificadas para el logro de los objetivos. Es necesario generarlos y manejarlos de manera regular y sistémica para que se conviertan en una valiosa herramienta de evaluación y gestión(15). Esta situación se puso de manifiesto en las siguientes afirmaciones:
La falta de conocimiento(11).
… el problema de los profesionales que no entienden la importancia de esto, por lo que no lo apoyan(13).
Cuando no se tiene el conocimiento, se hace más difícil y se pierde más tiempo. Si sabes cómo usarlos, es más rápido y práctico de hacer(26).
Se trata de saber exactamente cómo hacerlo. Para hacerlo de cualquier manera, al final de nuestro turno sólo rellenamos los indicadores, pero a veces, no sabemos por qué o para qué sirve, o los resultados que traerá después(23).
Un estudio realizado en Montes Claros, MG, identificó las dificultades en el uso de indicadores para evaluar la calidad de los resultados y la falta de conocimiento teórico y práctico de esta metodología en los servicios de salud, lo que refleja la responsabilidad de las instituciones de salud en la mejora de los programas de educación continua(15).