Los implantes dentales están ampliamente considerados como la solución de sustitución de dientes más fiable. Gracias a su capacidad para integrarse de forma segura con el hueso y el tejido gingival existentes, ofrecen una opción segura y duradera para los pacientes que no quieren conformarse con métodos de sustitución inferiores.
Dicho esto, es posible que los implantes dentales fallen, aunque sea poco frecuente. En el futuro, es posible que tenga que sustituir o restaurar el implante recibido por una serie de razones. A continuación, le indicamos algunos que se han producido en casos anteriores, así como la forma en que su dentista soluciona los fallos en caso de que se produzcan.
Fallos que pueden producirse al principio
Suponiendo que su dentista esté cualificado para colocar implantes dentales y tenga experiencia demostrada al hacerlo, los errores en la colocación inicial no deberían ser probables. Sin embargo, no es inaudito que un dentista sólo se preocupe de cobrar por colocar implantes dentales en lugar de poner la mayor parte de su atención en el paciente, que es donde debe estar.
Por ejemplo, cuando se está preparando el alveolo antes de la colocación, el hueso podría sobrecalentarse. Si el dentista utiliza demasiada fuerza o no la suficiente al colocar el implante en el hueso, puede hacer que falle antes de tiempo.
Si el implante o la zona que lo rodea se contamina, puede interferir en el proceso de osteointegración, que es el proceso que permite que el implante se adhiera de forma natural dentro de la boca.
Aunque es poco probable, también podría haber un hueso insuficiente para recibir un implante. Esto debe ser determinado por el dentista con antelación y se debe cumplir con los tratamientos de injertos óseos adicionales para aumentar el volumen óseo.
Fallos que podrían ocurrir después
Los implantes están destinados a ser increíblemente seguros, incluso más que los dientes naturales porque los implantes no tienen un ligamento periodontal. Mientras que los dientes naturales pueden moverse técnicamente si se aplica una ligera presión sobre ellos, los implantes no deberían sentirse flojos, tambaleantes ni caerse en absoluto.
Si un implante falla mucho tiempo después de que se haya completado el tratamiento, suele ser porque se le aplicó una fuerza excesiva. Aunque una lesión dental puede causar esto, es más común que se produzcan cambios en la oclusión, o la forma en que una persona muerde. Si los pacientes tienen problemas para apretar o rechinar los dientes, tendrán que adquirir la protección suficiente para evitar que el implante se rompa.
Cómo arregla el dentista los fallos de los implantes
El primer paso que da el dentista es crear un diagnóstico preciso de por qué ha fallado el implante. Examinará todas las partes del implante, incluida la restauración, el pilar, los dispositivos de rosca y el material del pilar, y determinará si necesitan ser sustituidos.
Por suerte, los implantes que fallan pueden tratarse rápidamente, pero tenga en cuenta que si su dentista necesita proteger su salud oral, retirará el implante por completo para hacerlo. Si no se repara un implante que falla, también se pueden poner en peligro los dientes cercanos, por lo que es esencial que los pacientes busquen tratamiento si creen que su implante está fallando.
No deje que el fallo de un implante le impida conservar una sonrisa totalmente funcional. Si teme que su implante esté fallando, programe una cita con su dentista especialista en implantes hoy mismo.
Acerca del autor
El Dr. Jacob Milner ofrece múltiples soluciones para sustituir los dientes con dispositivos retenidos por implantes. Ya sea que necesite implantes tradicionales, mini-implantes dentales, dentaduras retenidas por implantes o Dientes en un día, su dentista está más que preparado para hacer que el tratamiento sea fácil y sencillo. Para saber más sobre su consulta, póngase en contacto con él a través de su página web.