La pancreatitis aguda representa un espectro de la enfermedad, que va desde una enfermedad leve y transitoria hasta una forma hemorrágica grave y rápidamente progresiva, con necrosis masiva y tasas de mortalidad de hasta el 24%. La incidencia notificada de pancreatitis aguda diagnosticada por primera vez en la autopsia clinicopatológica oscila entre el 30% y el 42%. Para describir mejor los casos mortales de pancreatitis aguda que se presentan como muerte súbita e inesperada, hemos revisado retrospectivamente los archivos de autopsias del Instituto de Medicina Legal de la Universidad de Hamburgo, Alemania, entre 2000 y 2004. En los casos individuales se analizaron el sexo, la edad, la raza, las circunstancias de la muerte, los antecedentes sociales del fallecido y la historia médica previa, la aparición estacional de la enfermedad, la concentración de alcohol en sangre en el momento de la muerte, el índice de masa corporal, los hallazgos de la autopsia, la histopatología y la etiología de la pancreatitis aguda. Entre las 6178 autopsias realizadas durante el periodo de 5 años evaluado, hubo 27 casos de pancreatitis aguda que se presentaron como muerte súbita e inesperada. En todos los casos, el diagnóstico se realizó por primera vez en la autopsia. La proporción hombre:mujer fue de 1,7:1 y la edad media fue de 52 años (rango, 30-91 años). Las etiologías de la pancreatitis aguda incluyeron el alcohol (n=19), los cálculos biliares (n=2), otros factores etiológicos identificados (n=3) e idiopática (n=3). Las complicaciones de la pancreatitis aguda incluyeron edema pulmonar y/o síndrome de dificultad respiratoria aguda, peritonitis, coagulación intravascular diseminada y sepsis. Al menos 20 sujetos (74%) habían vivido aislados, sin contactos sociales. Contrariamente a las observaciones clínicas de una clara variación estacional en la aparición de la pancreatitis aguda, no encontramos ninguna correlación entre la muerte debida a la pancreatitis aguda y un mes o estación específicos. Muchos estudios anteriores han sugerido que la mayoría de las muertes en la pancreatitis aguda grave se producen en la fase tardía de la enfermedad como resultado de la sepsis pancreática. Por el contrario, en el presente estudio, la mayoría de los individuos afectados murieron durante la fase más temprana de la enfermedad. Mientras que los cálculos biliares representan el principal factor etiológico en la mayoría de las grandes series clínicas, la etiología biliar parece desempeñar sólo un papel menor en las muertes de pacientes externos sometidos a autopsias médico-legales. Los datos derivados de los estudios de autopsias médico-legales deberían incluirse en futuros estudios poblacionales de pancreatitis aguda.