Peces de los Grandes Lagos

Sostenibilidad

Las normativas estatales y tribales garantizan que los peces se capturen de forma sostenible en los Grandes Lagos. Organizaciones como la Comisión de Pesca de los Grandes Lagos ayudan a coordinar los debates entre los siete estados, las numerosas tribus y los dos países para trabajar juntos en la gestión de las poblaciones de peces de los Grandes Lagos. Las licencias estatales de pesca comercial son limitadas (10 licencias en las aguas de Wisconsin del lago Superior y 65 licencias en las aguas de Wisconsin del lago Michigan). También existe la pesca comercial tribal (10 licencias para embarcaciones grandes y unas 20 para embarcaciones pequeñas de Red Cliff en las aguas de Wisconsin del lago Superior) y la pesca de subsistencia en las aguas de Wisconsin del lago Superior. En la actualidad, no hay capturas comerciales tribales en las aguas de Wisconsin del lago Michigan.

Además, en el caso de algunas especies, como la trucha del lago Superior y el pez blanco del lago Michigan, el número permitido de peces capturados se determina mediante un muestreo científico periódico. La cosecha anual se divide entonces entre las licencias de pesca comercial en cuotas. Así, cada pescador comercial tiene garantizado un porcentaje del total de la cosecha anual permitida y no tiene que competir con otros. Las regulaciones adicionales relativas a los tipos de artes de pesca utilizados y a los lugares de pesca garantizan una captura mínima de especies de peces no deseadas y protegen el hábitat sensible.

Las redes de enmalle y las redes de trampa son las principales formas de captura comercial de peces en los Grandes Lagos. La red de enmalle fue uno de los primeros equipos de pesca modernos que se introdujeron en los Grandes Lagos en el siglo XIX porque podía utilizarse desde pequeñas embarcaciones de pesca con poca inversión en equipos. Las redes de trampa en aguas profundas se introdujeron en la década de 1920 y pueden ser más eficaces a la hora de capturar especies específicas de peces y facilitan la devolución al agua de los peces no capturados. Ambos tipos de redes son colocadas por los pescadores y recuperadas otro día.

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