Taege compara esta inflamación con la respuesta de tu piel a un objeto muy caliente. Sientes dolor, y el lugar que se ha quemado se pone rojo y posiblemente se forme una ampolla. Al cabo de unos días, el lugar quemado empieza a calmarse y a curarse.

“Las citoquinas producen una reacción inflamatoria que no provoca necesariamente una ampolla como la de una quemadura térmica, pero si se mira la garganta puede parecer roja. Si miras las vías respiratorias pueden parecer rojas”, dijo Taege. “Se trata de una inflamación, y la forma en que interactúa con las células y las lesiona pasa a producir síntomas”.

Los experimentos han demostrado que las personas expuestas a citoquinas artificiales desarrollarán síntomas de infección de gripe, aunque el virus no esté presente, dijo Taege.

Esto no quiere decir que el virus no pueda hacer daño por sí mismo, añadió Poland.

“Recientemente tuvimos un joven sano que murió de gripe”, dijo Poland. “La autopsia demostró que el virus había invadido su corazón y murió a consecuencia de ello”.

El virus de la gripe que infecta los pulmones puede provocar directamente dificultad para respirar, fiebre y neumonía, añadió Poland.

Pero muchas de las muertes causadas por la gripe se producen debido a una “tormenta de citoquinas”, una abrumadora avalancha de sustancias químicas inmunitarias provocada por la primera exposición a un nuevo y peligroso virus de la gripe, dijo Poland.

Se cree que muchas de las personas jóvenes y sanas que murieron a causa de la gripe durante la pandemia de 1918 murieron debido a la tormenta de citoquinas.

“El cuerpo se activa de forma tan masiva en un intento de luchar contra este virus que libera demasiadas de estas sustancias químicas internas”, dijo Poland.

Por eso se recomiendan las vacunas contra la gripe. Enseñan al cuerpo a producir anticuerpos para combatir la gripe sin montar una defensa de citoquinas en toda regla, explicaron Taege y Poland.

Con la actividad de la gripe todavía elevada en gran parte de Estados Unidos, Taege dijo que la vacuna puede ayudar a limitar su daño.

“Si se encuentra con el virus de la gripe, entonces puede controlarlo mucho más rápidamente”, dijo Taege.

Las personas que tratan los síntomas de la gripe suelen tratar la inflamación producida por la liberación de citoquinas. Por eso se recomiendan los antiinflamatorios no esteroideos (AINE) como la aspirina y el ibuprofeno (Motrin, Advil), dijo Poland.