Es una desafortunada verdad que a veces los que amamos son los mismos que nos hacen más daño. Eso es ciertamente lo que se puede sentir cuando tu mejor amigo te traiciona, que es lo que parece que estamos viendo pasar entre Kylie Jenner y Jordyn Woods en este momento. Ya sea que tu amiga haya divulgado tu secreto que juró nunca contar o que se haya enrollado con tu enamorado, ciertamente puede hacerte caer en picada cuando tu confidente más cercano lo hace a tus espaldas. Y lo que puede ser especialmente doloroso es que probablemente siga siendo la persona con la que quieres desahogarte sobre tus sentimientos.
Por supuesto, algunas traiciones son más serias que otras – y lo que puede parecer una traición puede ser en realidad sólo un bache en vuestra amistad. Pero si ha sucedido algo de lo que no hay vuelta atrás, es difícil saber hacia dónde debes dirigirte. Para ayudarte a resolverlo, hemos recurrido a los expertos. Así que, sin más preámbulos, aquí tienes cómo afrontar si tu mejor amigo te hace daño.
Es tentador lanzarse a las tareas del colegio, o empezar inmediatamente a salir sin parar con otro grupo de amigos si nos sentimos heridos en un intento de distraer las emociones negativas. Pero eso podría no ser el curso de acción más saludable. En su lugar, la doctora Rachel O’Neill, consejera clínica profesional licenciada en Ohio y terapeuta de Talkspace, dijo que lo mejor es permitirse sentir cualquier emoción que surja después de una traición.
“Tienes derecho a sentir lo que sea que estés sintiendo”, dijo O’Neill a Teen Vogue. “Es importante permitirte el espacio para experimentar tus emociones sin juzgarlas o tratar de alejarlas”.
En lugar de decirte cómo “deberías” sentirte y perseguir eso, O’Neill recomienda centrarse en “lo que estás sintiendo”. Abrazar esas emociones puede ser incómodo, pero es parte del proceso.
Considera tus próximos pasos
Tu primer instinto puede ser enfrentarte a tu amiga y decirle exactamente cómo te ha herido, pero O’Neill anima a tomarse un momento para pensar en lo que realmente quieres de ese tipo de situación. En lugar de apresurarse a enviar un mensaje de texto con todas sus emociones, O’Neill recomienda pensar en lo que espera obtener al hacerlo.
“¿Qué espera que suceda si se enfrenta? ¿Cuál es el mejor escenario posible? ¿Cuáles son las posibles consecuencias negativas de la confrontación?”, preguntó.
Si decide que una confrontación podría ser útil para usted, O’Neill dijo que “puede ser útil tener un poco de tiempo para procesar sus emociones primero. De lo contrario, la confrontación podría derivar en una discusión”.
Piensa si aceptarías una disculpa
Si tu amigo se acerca a ti con una disculpa sincera, ¿estarás abierto a ella? Según O’Neill, eso depende totalmente de ti.
“Considera lo que la disculpa significa para ti”, dijo. “Todo el mundo comete errores y nadie es perfecto, pero eso tampoco significa que tengas que aceptar necesariamente la disculpa”.
Si te sientes preparado para aceptar una disculpa, O’Neill también señaló que eso no significa que hayas perdonado necesariamente a tu amigo.
“Aceptar una disculpa y perdonar son también conceptos distintos”, dijo. “Es posible que aceptes las disculpas pero que tampoco estés preparado para dejar que la persona vuelva a tu vida de inmediato”.
Eso significa que tienes que pensar en ambas cosas: 1. si estás dispuesto a aceptar una disculpa, y 2. si estás preparado para perdonar a tu amigo. En última instancia, es tu decisión y debes considerar lo que necesitarías de tu amigo en caso de que decidas buscar el perdón.
Saber cómo romper
Si decides que es necesario romper con un amigo, debes saber que necesitarás un tiempo de duelo.
“La gente tiene esta idea de que un corazón roto por un romance es lo que se supone que hay que llorar, mientras que un corazón roto por una amistad no lo es”, dijo anteriormente Isaiah Bartlett, LCSW, a Teen Vogue. “Pero esto no tiene ningún sentido… y significa que la gente trata de presionarse prematuramente para sentirse mejor cuando todavía no está preparada para hacerlo”.
Esto es similar al consejo de O’Neill sobre qué hacer inmediatamente después de la traición. Bartlett continúa sugiriendo la “aceptación radical” para cualquier persona que experimente una ruptura con un amigo, lo que básicamente significa aceptar cualquier sentimiento que surja sin juzgarlo. De este modo, se puede analizar el dolor que inevitablemente causará la pérdida de un amigo y, finalmente, seguir adelante.
Si fuiste tú quien traicionó, discúlpate pero dale espacio a tu amigo
Si eres tú quien se equivocó y traicionaste a tu amigo, debes saber que probablemente tengas un duro camino por delante. O’Neill dice que debes hacer todo lo posible para disculparte con tu amigo y tomar medidas para mejorar las cosas, pero ten en cuenta que puede que no funcione a tu favor.
“Intenta hacer todo lo posible para reparar el daño. No hay nada que puedas hacer para cambiar el pasado, pero puedes asumir plenamente lo que ha sucedido y disculparte por el dolor que has causado”, dijo. “Recuerda que tu amigo puede necesitar tiempo para superar lo sucedido; prepárate para darle espacio mientras trabaja con algunos de esos sentimientos a su propio ritmo”.
Como las disculpas no siempre son fáciles, lo mejor es hacer las cosas bien a la primera. Eso significa pensar realmente en por qué te estás disculpando, y cómo quieres mejorar las cosas, dijo previamente a Teen Vogue Cynthia V. Catchings, trabajadora social clínica licenciada y proveedora de Talkspace.
“¿Cuándo debemos disculparnos con un amigo? Cuando hemos analizado la situación, nos sentimos preocupados por ella y hemos encontrado una manera de compensar o hacer que la otra persona se sienta mejor”, dijo. La compensación puede consistir en llevar a tu amigo a cenar, enviarle una tarjeta o hacer alguna otra cosa sincera que sepas que le gustaría.
En última instancia, ésta puede ser una situación difícil para todos los implicados. Pero con un poco de planificación cuidadosa y consideración, las amistades pueden ser restauradas o superadas. Lo más importante es ser respetuoso con uno mismo y con los demás durante el proceso, pase lo que pase.
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