‘El médico me hizo una serie de pruebas y me dijo que si seguía con lo que hacía estaría muerto en tres años.
‘Enseguida dejé el alcohol y el tabaco y asistí a terapia conductual para averiguar por qué utilizaba la comida para sentirme mejor.
‘Pasé de darme un atracón de 15.000 calorías en una o dos sentadas a comer siete u ocho veces al día, con cada comida de unas 200 calorías.
“En la primera semana perdí medio kilo y a partir de ahí el peso no dejó de caer, hasta el punto de que me costó dejar de perder peso y tuve que aumentar mi ingesta de calorías para mantener un peso saludable”.
En sólo diez meses, Ross perdió más de la mitad de su peso corporal pero, debido a su extrema pérdida de peso, no le quedó más remedio que someterse a un lifting corporal para eliminar su grave exceso de piel.
Dijo: ‘Mi ombligo estaba a la altura de mis rodillas y tenía que meter la piel dentro de mis pantalones cortos para ocultarlo, era humillante.
LA DIETA DE ROSS ANTES
Desayuno: Tres McMuffins de salchicha, huevo y queso; dos hash browns
Almuerzo: Filete de queso de 12″ con patatas fritas o dos hamburguesas con aros de cebolla
Cena: Pizza entera
Merienda: Alitas de búfalo, Cheezits, queso y galletas
… Y SU DIETA AHORA
Desayuno: Claras de huevo, fresas, leche de anacardo
Almuerzo: Pollo y brócoli O pescado con lentejas y frijoles negros
Cena: Pollo, pescado, venado o bisonte con verduras
‘El cirujano me quitó 2 kilos de exceso de piel alrededor del torso y después de la larga y difícil recuperación me sentí como un hombre nuevo.
‘Iba al gimnasio seis o siete veces a la semana, y todavía lo hago ahora, y gracias a esto no tuve que operarme los brazos o las piernas, lo que fue un gran alivio’
Ahora que pesa unas saludables 203 libras (14 stone 7 lbs), Ross está decidido a ayudar a otros.
“Volví a estudiar medicina y acabo de obtener el título de médico quiropráctico”, dijo. Ahora ayudo a los demás y quiero demostrar que nunca es demasiado tarde para dar un giro a la vida”.