Consejos de conducción de Lamborghini

Max Venturi tiene un nombre diseñado para la velocidad. No es de extrañar que haya acabado como jefe de pruebas e instructor de conducción de Lamborghini.

Es el tipo de persona que se pasa el día al volante de un coche de 350 km/h y que ha aparecido en programas de televisión como Top Gear.

Ahora, hoy, el pobre hombre tiene la tarea de intentar enseñarme a conducir un Lamborghini de medio millón de dólares.

Y no un Lamborghini cualquiera – el flamante Aventador, que actualmente tiene una lista de espera de dos años, con la fábrica incapaz de mantener la demanda de esta bestia.

Estoy en la Academia Lamborghini en el famoso circuito de Imola, en la región italiana de Emilia Romagna. Hoy somos siete en la escuela y me temo que soy el menos experimentado.

Uno de los otros con los que hablo tiene seis coches en casa en Estados Unidos, incluido un Lamborghini. Sin embargo, Max me dice que no me preocupe.

“Normalmente quien viene a conducir este coche tiene experiencia con los deportivos”, dice con su acento italiano.

“Pero esto no quiere decir nada porque hay gente que viene aquí y quizá piensa en ser el mejor piloto pero siempre hay que aprender algo”

Trabajando con su suposición de que siempre hay algo que aprender, me gustaría transmitirte sus consejos más útiles.

Es un poco complicado, pero es lo fundamental de toda buena conducción: girar en las curvas con el freno.

Ok, normalmente no entras a 200 km/h, pero lo básico se aplicará independientemente de lo que conduzcas normalmente.

Como dice Max en un momento dado: “Esto es lo más importante que puedes aprender, la frenada, porque cuando sales a la pista estás pensando que puedes ir lo más rápido posible pero sin frenar no puedes ir rápido.”

Posición de las manos

En primer lugar, y de forma rápida, la mejor posición de las manos.

Recuerdo que me enseñaron de adolescente que las manos deben estar en la posición 10 y 2 del volante. Max cree que en realidad se consigue mucho más control, sobre todo a alta velocidad, con las manos en la posición 9 y 3.

En caso de que no sepas a qué me refiero, la imagen de abajo te muestra lo que deberías hacer.

Posición de los pies

Esto puede ser bastante obvio, pero es algo que Max todavía se asegura de señalar.

Los Lamborghini no tienen embrague porque los cambios de marcha están en el volante, por lo que sólo usamos un pie para conducir. Lo mismo ocurriría con cualquier coche automático.

El pie derecho controla el freno y el acelerador, y el izquierdo debe asentarse en el reposapiés para conseguir el equilibrio adecuado.

Sólo los conductores muy profesionales (y los aficionados a los karts) utilizan los dos pies para controlar el freno y el acelerador. Estas pequeñas cosas pueden ser importantes en el conjunto.

“Debes saber que tienes mucha potencia que gestionar”, advierte Max.

“Con la electrónica, los coches de hoy son muy seguros. Pero se oye muchas veces a gente que dice ‘el coche hace esto, el coche hace lo otro’. No es el coche, eres tú el que conduce el coche”.

Frenar en una curva

Ahora pasamos a lo más importante: frenar en una curva.

El consejo de Max es frenar fuerte al principio y luego soltar el freno poco a poco, en lugar de pisar el pedal lentamente.

Si la fuerza del freno estuviera en una escala del 10 al 1, empieza en el 10 (el freno más fuerte) y llega al 3 antes de empezar a girar el volante.

“Hay gente que piensa que puede acelerar antes de la curva”, señala Max, “y ha aprendido que si acelera antes de girar, el coche no gira.”

Doblar en una curva

Esta es probablemente la parte más complicada, y lo que más me costó dominar cuando daba mis vueltas a Imola con el Aventador.

Cuando llegas al punto en el que empiezas a girar el volante, la frenada debería ser casi completa y estarás sacando el pie del pedal mientras giras.

Quieres girar el volante y apuntar hacia el ‘ápice’ de la curva (es la parte más estrecha de la curva). Habrá un breve lapso de tiempo entre el giro y la llegada al vértice; durante este tiempo, Max recomienda no pisar el acelerador ni el freno.

Sólo tienes que deslizarte por la parte más estrecha de la curva y luego, al salir de ella, empezar a pisar el acelerador y abrir el volante para volver a enderezar.

Si puedes descifrar los garabatos que Max ha hecho en el diagrama de aquí, verás lo que quiero decir:

Y aquí, en sus propias palabras, es como lo dice Max:

“No puedes acelerar antes de girar. Tienes que empezar a abrir el volante y acelerar al mismo tiempo”

“Tienes que ser capaz de abrir el volante y luego acelerar. Esto es lo más importante que hay que recordar, no sólo con los coches deportivos, sino con cualquier tipo de coche”.

Llevando la técnica a las calles

Y eso, amigos míos, es la información más valiosa que podéis obtener sobre las habilidades de conducción, directamente de uno de los mejores pilotos del mundo.

Obviamente es más relevante para entornos de alta velocidad en los que tienes toda una pista por la que moverte, pero los elementos os ayudarán con cualquier tipo de conducción con cualquier tipo de coche.

Ese es uno de los puntos de la Academia Lamborghini.

“No sólo aprendes a conducir bien en la pista”, dice Max, “sino que puedes llevar todo eso incluso a las carreteras normales.”

“Me refiero no a la velocidad, sino quizá a la técnica para abordar la curva.”

Así que ¡cuidado! La próxima vez que veas un viejo utilitario blanco girando en una curva con perfecta precisión, ¡podría ser alguien que aprendió todo lo que sabe en las curvas de Imola!

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