Su chimenea de leña está hecha para una cosa: leña. Está en el nombre. Sin embargo, muchos utilizan su chimenea como una forma fácil de deshacerse de cajas, botellas u otra basura. Esto no sólo es malo para su chimenea, sino que puede conducir a problemas de salud a largo plazo para cualquier persona que respire los subproductos. Lea estos consejos de seguridad para la chimenea sobre lo que no se debe quemar y protéjase de las sustancias químicas peligrosas y de los incendios en la chimenea.

9 cosas que nunca debe quemar en una chimenea

Cartón

Aunque es fácil de encender y puede parecer una buena manera de ayudar a iniciar un fuego, quemar cartón puede ser peligroso. Como el cartón está tratado con productos químicos y a menudo contiene tintas, puede liberarlos en el aire cuando se quema. Además, el cartón es muy ligero y tiende a flotar. Si un trozo de cartón ardiendo se escapa de su chimenea, podría iniciar rápidamente un incendio en los combustibles cercanos. O, más comúnmente, pueden flotar hacia su chimenea y causar un incendio en la misma. En definitiva, hay demasiados riesgos en la quema de cartón.

Plásticos

A pesar de ser uno de los materiales más peligrosos para quemar, los plásticos se queman comúnmente en chimeneas y fogones. Ya sea por comodidad o para ahorrar dinero, personas de todo el mundo queman plásticos a diario. Aunque hay muchos tipos de plásticos que pueden producir subproductos nocivos ligeramente diferentes, como el monóxido de carbono, todos son igualmente peligrosos.

La dioxina es una emisión que proviene de la quema de plásticos como el PVC. Esta sustancia química tóxica no sólo es cancerígena, sino que puede tener otros efectos graves, e incluso puede transmitirse de madre a hijo durante el embarazo. La exposición inmediata al plástico quemado puede provocar dolores de cabeza, debilidad, fatiga y daños en los ojos o el sistema respiratorio. Además, las emisiones pueden depositarse en los cultivos o en las fuentes de agua. Cuando esto ocurre, las sustancias químicas se acumulan y pueden ser ingeridas posteriormente.

La quema de plástico es peligrosa para usted, sus vecinos y su comunidad. Asegúrese de reciclar todos los plásticos que pueda y manténgalos alejados de su chimenea o fogones.

Madera tratada o pintada

El arseniato de cobre cromado era uno de los conservantes más comunes en la madera tratada más antigua. El arseniato es un compuesto de ácido arsénico. No hace falta ser químico para saber que el arsénico es malo para la salud. Cuando se quema madera antigua tratada, se libera este arsénico en el aire, mientras que una parte se queda en las cenizas. Incluso la madera tratada moderna contiene sustancias químicas nocivas, aunque el arseniato en sí es menos común. Si esto no fuera suficiente para convencerle, también es ilegal quemar madera tratada a presión en todos los estados.

De forma similar, las maderas pintadas más antiguas contienen otras sustancias químicas peligrosas. Hasta la década de 1980, la pintura solía contener plomo. Después, las pinturas empezaron a utilizar mercurio. Aunque las pinturas modernas tienden a ser más seguras, no lo son. La quema de cualquier madera pintada no sólo liberará las sustancias químicas de la pintura en el aire, sino que la pintura actúa como acelerante y puede quemarse demasiado rápido.

Madera flotante

No basta con limitarse a quemar madera natural: también hay que asegurarse de que se queman los tipos de madera adecuados. Si has recogido un montón de madera a la deriva, no la utilices en tu chimenea. Debido a su contenido en sal, puede dañar o corroer partes de su chimenea o el revestimiento de la misma. A altas temperaturas, la quema de madera a la deriva también puede liberar carcinógenos en el aire. Incluso si la madera a la deriva se ha secado completamente, no es segura para su uso en una chimenea doméstica.

Acelerantes del fuego

Si estaba pensando en añadir gasolina o líquido de parrilla a su chimenea para encender el fuego, querrá reconsiderarlo. Si bien estos acelerantes del fuego tienen su lugar en otras aplicaciones, su chimenea y el hogar no fueron diseñados para manejar los incendios de esa manera. La gasolina o el queroseno pueden crear llamas que arden a una temperatura extremadamente alta e incluso arden en lo alto de su chimenea. Esto puede encender la creosota u otros subproductos si no se ha mantenido al día con la limpieza anual de la chimenea.

Manejar acelerantes del fuego en el interior puede ser extremadamente peligroso y ponerle en riesgo sustancial de un incendio por goteo o mal uso. Están diseñados para ser utilizados con parrillas al aire libre – no en un ambiente interior controlado y apretado.

Papeles o cajas con impresiones de colores

Al igual que el cartón o la madera pintada, las cajas y el papel con impresiones de colores u otras marcas en ellos pueden venir embalados con productos químicos. Estos son algunos ejemplos de cajas que nunca debe quemar:

• Cajas de cereales
• Cajas de pizza
• Papel de envolver
• Revistas

Otro consejo de seguridad para la chimenea con respecto a estos materiales es tener cuidado con los incendios peligrosos. Además de los riesgos químicos, estos materiales suelen tener una elevada relación superficie-masa. A diferencia de la madera, que arde lentamente durante largos períodos de tiempo, el papel y las cajas arden rápidamente. Esto puede dar lugar a llamas altas que podrían encender la creosota en su chimenea. Si aún así decide quemar papel en su chimenea, esté atento a una llama que arda demasiado alta.

Pelusa de secadora

No es una sugerencia poco común utilizar pelusa de secadora como iniciador del fuego. Se quema fácilmente y se puede obtener, esencialmente, de forma gratuita. Sin embargo, eso no la convierte en una buena opción para encender el fuego. La pelusa de la secadora contiene todo tipo de sustancias químicas, desde la suciedad y el polvo que recoge hasta los subproductos de los tejidos, los detergentes y los suavizantes.

Espuma de poliestireno

La espuma de poliestireno moderna no contiene los clorofluorocarbonos que solía contener. Pero eso no significa que sea más seguro quemarlo. La quema de poliestireno libera un gas de estireno tóxico. Si se inhala, puede tener un efecto muy perjudicial para el sistema nervioso. La sustancia negra de carbono que deja el poliestireno quemado puede causar irritación a corto plazo en los ojos y la garganta. Si quema poliestireno con frecuencia, los estudios han demostrado un aumento de las cicatrices en los pulmones, bronquitis y reducción de la capacidad pulmonar.

Árboles de Navidad

Sólo porque las fiestas terminen, no significa que el clima frío se vaya con ellas. Es posible que tenga la tentación de desmontar su árbol de Navidad y deshacerse rápidamente de él en su chimenea. Después de todo, son unos cuantos metros de buena leña, ¿verdad? Pues no es así. Un árbol de Navidad fresco está lleno de savia. No sólo arderá mal, ya que no se ha secado correctamente, sino que la savia puede dejar resinas peligrosas en su chimenea. En casos extremos, estas resinas pueden provocar un peligroso incendio en la chimenea.

Su chimenea no es un incinerador

Las chimeneas, estufas y hornos están construidos y probados para la seguridad. Pero estas precauciones de seguridad presuponen que usted está utilizando su aparato de combustión de leña como está previsto. Cuando usted quema una sustancia que no es madera en su chimenea, podría estar causando daños irreversibles a usted, a su hogar y a su chimenea. Pueden envenenarle, provocar corrosión e incluso peligrosos incendios en la chimenea. Nuestro consejo de seguridad para la chimenea más importante: limítese a quemar leña seca y debidamente curada para disfrutar de un fuego cálido y seguro.

¿Necesita una inspección de la chimenea? Llame a Doctor Flue!

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