Uno de los aspectos más críticos pero a menudo olvidados del movimiento #MeToo es la importancia de los aliados masculinos en la lucha contra la agresión y el acoso sexual. Pues bien, ahora tenemos la que podría ser la primera demanda presentada por un aliado del #MeToo.

Mark Steines, ex presentador del canal Hallmark, alega que Crown Media, la empresa matriz de la cadena, le despidió como represalia por su postura contra el acoso. Steines fue presentador de Home & Family durante seis años antes de que se rescindiera su contrato a principios de este año.

La demanda, presentada en el Tribunal Superior de Los Ángeles, afirma que Steines “advertía y alertaba regularmente” a la cadena sobre el comportamiento abusivo del productor ejecutivo Woody Fraser, quien, según Steines, creaba un “ambiente de trabajo vulgar, degradante y hostil, especialmente para las mujeres.” Steines alega que Fraser hizo “comentarios sexualmente lascivos sobre invitadas atractivas mientras hablaba con el señor Steines a través de su auricular durante el rodaje del programa” y abrazó y masajeó “a la fuerza” a las empleadas.

Después de que dos productoras presentaran demandas por acoso sexual contra Fraser, Steines se reunió con sus abogados, entre ellos Lisa Bloom, que representa a varios clientes de Hollywood, como Blac Chyna en su demanda por porno de venganza y contra Rob Kardashian. Steines compartió “información veraz” que apoyaba las reclamaciones de sus colegas, y a partir de entonces, según la demanda, la cadena “redujo sustancialmente su salario, recortó abruptamente su trabajo regular de locución, disminuyó su papel en los eventos de la cadena y lo eliminó de la secuencia de apertura del programa para la sexta temporada.”

Steines, que también está representado por Bloom, alega que finalmente fue despedido de su puesto “de una manera totalmente poco profesional con la intención de humillar personalmente al tiempo que se maximizaba el daño a su reputación profesional”.

En un comunicado en su página web, Crown Media sostiene que la demanda no tiene “ningún mérito” y que el despido de Steines fue una “decisión comedida, estratégica y difícil de tomar por parte de Crown Media, pero que era necesaria dado el descenso de la audiencia.”

Crown Media también citó “una investigación de terceros” que encontró que Steines era “percibido negativamente”.

Después, en su declaración, la compañía se tomó el tiempo para apuntar personalmente a Bloom e insinuar que tiene un conflicto de intereses.

“Crown Media también está sorprendida de que Lisa Bloom esté representando al señor Steines en este asunto, ya que tiene un acuerdo de consultoría con Crown Media”, dice la declaración.

Respecto a esta acusación, Bloom me dijo por correo electrónico que la estrategia de la empresa de “disparar al mensajero” fracasará” y que Crown Media ha sabido del “trato chapucero a Mark Steines” durante meses, ya que ella se ha comunicado con ellos por escrito.

Además, la negación de Bloom de un conflicto de intereses no puede ser más inequívoca.

“No hay ningún acuerdo entre Crown Media y yo. Nunca he consultado con nadie de Crown Media. Ni por teléfono. Ni por correo electrónico. Ni por texto. Ni por correo postal. Ni por señal de humo ni por paloma mensajera”, escribió.

Suena como que Crown Media podría estar en una verdadera pelea aquí.