Anastasio Somoza, nacido en San Marcos el 1 de febrero de 1896, hijo de Julia García y Anastasio Somoza, plantador de café, recibió educación primaria en su pueblo. Después de asistir al Instituto Nacional de Oriente en Granada, Nicaragua, fue a Filadelfia para estudiar en la Peirce School of Business Administration. Mientras estaba en Filadelfia conoció a su futura esposa, Salvadora Debayle, de una prominente familia nicaragüense. De regreso a Nicaragua, entró en el mundo de los negocios; sin mucho éxito, aceptó varios trabajos antes de entrar en la vida política.
Durante la revolución liberal contra Emiliano Chamorro y Adolfo Díaz (1926-1927), Somoza se unió a la causa liberal. Cuando los liberales volvieron al poder tras las elecciones supervisadas por Estados Unidos en 1928, Somoza ascendió en la política nicaragüense. Los informes atribuyen este ascenso a su talento como intérprete durante las negociaciones que pusieron fin a la revolución y a su encanto y habilidad para el baile.
Los cargos que ocupó Somoza incluyeron el de administrador de impuestos y, posteriormente, el de gobernador del departamento de León, el de ministro en Costa Rica y el de subsecretario y secretario de relaciones exteriores. Cuando los Estados Unidos se prepararon para retirar a los marines y entregar a los nicaragüenses los puestos de oficiales de la guardia nacional entrenada por los Estados Unidos, el presidente José Moncada eligió a Somoza como comandante.
Después de la retirada de los marines el 2 de enero de 1933, y después de que el jefe guerrillero Augusto Sandino hiciera la paz con el gobierno en febrero, se desarrolló una fuerte hostilidad entre Somoza y Sandino. Esta animosidad alcanzó su punto álgido en la noche del 21 de febrero de 1934, cuando miembros de la guardia nacional secuestraron y fusilaron a Sandino, que se encontraba en Managua.
Cuando Somoza, que maniobraba para llegar a la presidencia, se convenció de que el presidente Juan Bautista Sacasa intentaba frenar su candidatura al alto cargo, obligó al presidente y al vicepresidente a dimitir en junio de 1936. Tras un gobierno interino, Somoza tomó posesión el 1 de enero de 1937, después de su elección en diciembre.
Somoza ocupó la presidencia hasta 1956, con la excepción de un mandato, cuando Leonardo Argüello accedió al cargo en 1947. Argüello, demasiado independiente, fue expulsado y sustituido por uno de los ancianos tíos de Somoza, Víctor M. Román y Reyes. Somoza reasumió la presidencia en 1950, tras la muerte de su tío.
Mientras asistía a un banquete en León el 21 de septiembre de 1956, celebrando su renominación por la convención nacional liberal, Somoza fue fusilado por Rigoberto López Pérez. Somoza murió el 29 de septiembre en Panamá y fue enterrado en Managua.