Decodificación de la Mona Lisa

¿Te has preguntado alguna vez por qué la Mona Lisa está ampliamente considerada como el mejor cuadro del mundo? Seguramente no hace falta decir que es el cuadro más reconocible y famoso. Todo el mundo lo sabe. Pero, ¿qué hay de los sutiles matices que definen básicamente el carácter mismo del cuadro? No busque más, porque en este artículo hablaremos de esas mismas características. Yo mismo tengo una obsesión algo malsana con el cuadro. La réplica de tamaño natural del cuadro original que se encuentra justo al lado de mi cama podría dar fe de ello. Al fin y al cabo, las principales razones por las que el cuadro es una obra maestra se reducen a las técnicas que se utilizaron.

Leonardo da Vinci utilizó en gran medida una técnica de pintura casi olvidada que se llama sfumato (la palabra italiana para humo; un nombre adecuado). Es un proceso muy tedioso en el que la pintura/pigmento se aplica en capas finas, esta es también la razón por la que le llevó tanto tiempo pintarlo. Dibujaba una capa, esperaba a que la pintura se secara y luego dibujaba encima (un par de cientos de veces). Es una técnica que sólo muy pocas personas han dominado realmente y que ya no se utiliza. Especialmente no en el ámbito en el que la aplicaron los antiguos maestros.

Otra cosa que hace que la Mona Lisa sea tan especial es el hecho de que sus ojos fueron dibujados de una manera muy específica: literalmente te siguen cuando te mueves. Esta es otra ilusión óptica que se logra mediante una técnica especial de pintura, que comúnmente llamamos “Silberblick” en Alemania (no hay un término real para este efecto en el idioma inglés, que yo sepa). Aquí hay un enlace a un artículo científico que describe este fenómeno con mucho más detalle: Geometrical basis of perception of gaze direction

También me gustaría señalar que la mayoría de la gente parece vivir bajo la falsa suposición de que la Mona Lisa no tenía cejas. Eso no es correcto. El cuadro tenía originalmente cejas y pestañas, pero con el paso del tiempo ambas se erosionaron hasta el punto de que ya no son visibles. Un análisis exhaustivo del lienzo mediante espectroscopia de infrarrojos y fluorescencia de rayos X ha revelado restos de pigmentos que, al reconstruirse, eran mucho más oscuros que los que se han utilizado para la piel. De ahí la conclusión de que el cuadro fue pintado originalmente con ambos, cejas y pestañas. Pascal Cotte ha publicado un par de artículos que tocan este tema por si a alguien le interesa.

Otra cosa que la mayoría de la gente no sabe es el hecho de que en realidad hay dos Mona Lisa. Es cierto. Después de muchos estudios y pruebas revisadas por expertos se concluyó finalmente que esta pintura: (la Mona Lisa de Isleworth)

…también fue dibujada nada menos que por Leonardo da Vinci, el mismísimo maestro. Utilizó todas las técnicas mencionadas anteriormente e incluso los mismos pigmentos para esta “réplica”. Nadie sabe realmente por qué dibujó otra, pero la mayoría de los críticos de arte tienden a suscribir una de las dos conjeturas siguientes:

a) dibujó la segunda para poder tener una para él. (dibujó la Mona Lisa original para un noble italiano. Como muchos de vosotros sabréis)

b) practicó sus técnicas en la segunda, porque quería asegurarse de que la Mona Lisa original acabaría teniendo un aspecto perfecto.

p.s. Personalmente me apunto a esta última conjetura.

Mona Lisa de Isleworth vs. Mona Lisa original

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